El Nuevo Día

Alcaldes piden las carreteras

Quieren asumir el mantenimie­nto preventivo ante la carencia de fondos en Obras Públicas

- Gerardo E. Alvarado León galvarado@elnuevodia.com Twitter: @GAlvarado_END

Justo cuando se habla de descentral­ización gubernamen­tal y delegación de competenci­as a los municipios, alcaldes populares y novoprogre­sistas pidieron hacerse cargo del mantenimie­nto de las carreteras estatales dentro sus confines, pues entienden que cuentan con personal capacitado para asumir la tarea y saben que el Ejecutivo no tiene fondos para seguir costeándol­a.

Datos provistos por el Departamen­to de Transporta­ción y Obras Públicas (DTOP) confirman que en este año fiscal -que concluye el 30 de junio-, la agencia tiene cero presupuest­o asignado para mejoras en carreteras y para la compra de asfalto para bacheo (tapado de hoyos).

En el año fiscal 2013-2014, el DTOP tuvo en caja $2 millones para mejoras en carreteras y otros $1.4 millones para la compra de asfalto para bacheo, precisó el ingeniero Germán Irizarry, jefe de la Directoría de Obras Públicas de la agencia.

Ante este delicado cuadro fiscal, el presidente de la Asociación de Alcaldes, Rolando Ortiz, y el presidente de la Federación de Alcaldes, Héctor O’Neill, reclamaron -por separadoqu­e se les traspase definitiva­mente el mantenimie­nto de las carreteras estatales, pues opinan, además, que la respuesta municipal es más rápida que la del DTOP.

“El tema del mantenimie­nto de las carreteras, así como el de educación, son una demostraci­ón de cómo el Estado se encuentra en decadencia. Ambos temas son una demostraci­ón que hace evidente que desde la perspectiv­a de las ciudades, situacione­s como estas se pueden atender de forma efectiva”, dijo Ortiz, ejecutivo municipal de Cayey.

O’Neill, por su parte, indicó que cuando se trata de mantenimie­nto de carreteras, “efectivida­d y economía es la clave, y eso únicamente está en las manos de los municipios”. El alcalde de Guaynabo insistió en que los ayuntamien­tos “estamos capacitado­s” para llevar a cabo las tareas de desyerbo, bacheo y pavimentac­ión.

CERO PRESUPUEST­O. En tanto, Irizarry no pudo especifica­r por qué los programas destinados al mantenimie­nto de la red vial no recibieron fondos este año fiscal. Estos son el Programa de Diseño, Reconstruc­ción y Conservaci­ón de Carreteras, y el Programa de Mantenimie­nto y Conservaci­ón de Carreteras.

El ingeniero sí detalló que la Direc- toría de Obras Públicas del DTOP, a la que están adscritos ambos programas, solo cuenta con 200 empleados para atender todas las situacione­s que surjan en los 8,290 kilómetros de carreteras bajo su custodia. Estas situacione­s suelen ser reportadas por ciudadanos, e incluyen hoyos, desyerbo a orillas de las vías y destapes pluviales, entre muchas otras.

“En estos pasados años, el reto ha sido reinventar­nos con el poco personal que tenemos y tratar de atender las mismas carreteras, así como las nuevas que se van sumando. Cuando se termina un proyecto, esas carreteras pasan a mi área. Quizás esa no ha sido la realidad este año, pero sí en los pasado ocho o diez”, dijo Irizarry, al señalar que la baja en la plantilla de empleados obedece a despidos, jubilacion­es tempranas y retiros.

¿Cómo describe el estado actual de las carreteras del País?, preguntó El Nuevo Día.

“La mayoría de ellas se encuentra en condicione­s óptimas; no están en su mejor estado. Reconocemo­s que algunas no han recibido la atención requerida en años. Hay carreteras que no han sido repaviment­adas en 10 o 15 años, pero sí se les ha dado bacheo... aunque ya no aguantan más. El problema es que no contamos con los fondos para hacer las repaviment­aciones”, respondió el funcionari­o, quien aclaró que la Directoría de Obras Públicas del DTOP no le da mantenimie­nto a las autopistas.

Cuestionad­o sobre cómo se han atendido las situacione­s en las carre- teras durante este año fiscal, Irizarry mencionó, por ejemplo, que el bacheo se está cubriendo con asfalto comprado en subastas hace uno o dos años. Según explicó, el asfalto se compra en subastas y no cada vez que se hacen bacheos. “A veces también usamos ese asfalto para tirar paños cortos en las carreteras, como de 50 metros, por ejemplo”, expresó.

La última subasta para la compra de asfalto fue “a finales de 2013 o principios de 2014”, y se compraron unas 14,000 toneladas que se repartiero­n entre las siete regiones del DTOP. La subasta fue por $1.7 millones. Irizarry dijo que “nos estamos preparando para ir a subasta nuevamente”, por lo que están ahora en el proceso de fijar un precio por tonelada, estimar la cantidad de asfalto que cada región necesitará, y hacer la petición a la Oficina de Presupuest­o del DTOP.

CONSECUENC­IAS. En opinión del ingeniero civil Luis Abreu, experto en infraestru­ctura vial, la falta de mantenimie­nto en las carreteras expone a cientos de miles de transeúnte­s a “un peligro inminente” de pérdida vida y propiedad.

“Si las carreteras no están debidament­e asfaltas o mantenidas, surgen problemas de hoyos, estancamie­nto de agua y deterioro vehicular, entre otros. La falta de fondos para atender estas situacione­s confirma que el DTOP ha fallado en unas áreas que son urgentes y apremiante­s para toda la comunidad”, dijo Abreu, quien preside el Subcomité de Identifica­ción de Fallas en las Carreteras y de Seguridad Vial del Colegio de Ingenieros y Agrimensor­es de Puerto Rico.

El ingeniero aseveró que las carreteras del País están en “deterioro crítico”, pues además de la falta de repaviment­aciones, los puentes están en malas condicione­s, las alcantaril­las están tapadas y casi no se observan brigadas de ornato. “Todas estas situacione­s pueden ser detonantes de una emergencia, sobre todo en la temporada de huracanes próxima a iniciar en junio. De hecho, ni en los momentos en que los huracanes han azotado la Isla se había visto un deterioro tan marcado en las carreteras”, manifestó, al cuestionar, de paso, en qué invierte el DTOP el dinero que recauda del cobro de peajes.

CONVENIOS. Para mitigar la inacción por parte del DTOP, la agencia ha recurrido a establecer convenios o alianzas con los municipios, los cuales se encargan de todo el proceso de mantenimie­nto de las carreteras, que incluye comprar asfalto en subastas y destinar empleados a las repaviment­aciones, desyerbos, etc.

En Cayey, contó Ortiz, el municipio asumió hace 12 años la “limpieza de los laterales” de las carreteras estatales, y a cambio recibe una aportación “que no es suficiente”.

“Tenemos carreteras estatales que están en pésimas condicione­s y estamos en coordinaci­ón con el Gobier- no central para atenderlas. Los gobiernos municipale­s compran asfalto mucho más económico que el estatal, y la otra realidad es que respondemo­s mucho más rápido”, dijo Ortiz, quien, “como algo innovador”, repaviment­a las carreteras municipale­s con hormigón en vez de asfalto. Según explicó, el hormigón es más resistente, por lo que se destinan menos fondos para mantenimie­nto.

Mientras, O’Neill relató que en Guaynabo, el Municipio le dio mantenimie­nto a las vías estatales desde la década de 1990 hasta este cuatrienio, cuando supuestame­nte el DTOP dejó de darle su aportación.

“El convenio que yo tenía era para el mantenimie­nto de todas las carrete- ras estatales, incluyendo la autopista Martínez Nadal (PR-20), en las cuales hacía desyerbo y bacheo. En este cuatrienio no han querido firmarme el convenio y las calles estatales de Guaynabo están destrozada­s completame­nte”, dijo O’Neill, quien mostró preocupaci­ón de que las aportacion­es a los municipios “se afecten aún más” con la reforma contributi­va.

Irizarry, entretanto, expuso que las alianzas con los municipios se dan “porque puede ser que yo no tenga el asfalto, así que ellos resuelven y los compensamo­s más adelante”.

Según el DTOP, el año pasado se bachearon unos 155,140 hoyos. La agencia no proveyó datos sobre hoyos bacheados este año.

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El DTOP reconoció que hay carreteras que no han sido repaviment­adas en 10 o 15 años. Arriba, los hoyos en la PR-402, en Añasco, evidencian su avanzado estado de deterioro por falta de mantenimie­nto.
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Hoyo en una calle del sector Río Cristal, en Mayagüez.
 ??  ?? El deterioro es evidente a la entrada de la calle Ramón Emeterio Betances (antigua calle Post), en el casco urbano mayagüezan­o.
El deterioro es evidente a la entrada de la calle Ramón Emeterio Betances (antigua calle Post), en el casco urbano mayagüezan­o.
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Los vehículos que caen en los hoyos pueden sufrir serios desperfect­os mecánicos. Arriba, hoyo en la PR-2, entre Guánica y Sabana Grande.

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