Golpes de calor
Aun si tu perro acostumbra a estar al aire libre, puede sufrir un golpe de calor. Además, los cachorros, ancianos, o enfermos estám más propensos a deshidratarse o enfermarse, como resultado de la exposición al calor. Si sospechas que tu perro sufre de un golpe de calor, es muy importante reaccionar a tiempo para evitar que su perro pierda la vida. Para lograrlo, debes retirar al perro del ambiente caliente de inmediato.
● Si esta inconsciente, asegúrate de que no le entre agua por la nariz o boca cuando sigas las siguientes guías. Además, no le des aspirina para bajar la temperatura, esto puede llevar a otros problemas.
● Si es posible, llena la bañera con agua fresca (no fría) y ponga el perro en la bañera, manteniendo la cabeza elevada.
● • Si usas la manguera, asegúrate que el agua no esté muy fría, puede ser peor. La temperatura normal de un perro debe ser entre 100° a 103°F, por lo que si llega a 104°F, entra en zona peligrosa y 106°F o más puede ser mortal.
● Si la opción de la bañera no es posible, mueve al perro a un área fresca, coloca una toalla mojada sobre su cuerpo, remojando frecuentemente o aplica compresas frías en la cabeza, axilas o patas. Una bolsa de vegetales congelados también puede funcionar.
● Masajea las patas. Frotar vigorosamente ayuda a la circulación del perro y reduce el riesgo de shock.
● Permítele al perro tomar tanta agua fresca como desee. Añadir una pisca de sal lo ayudará a reemplazar los minerales perdidos mediante el jadeo. (Por Mónica Ferrer)