Juan Zaragoza pone al día a su sucesor en Hacienda
Secretario de Hacienda y su sucesor dialogan sobre estrategias para aumentar los recaudos
El Departamento de Hacienda continúa en la búsqueda de mejorar la captación, y en los próximos días dará a conocer nuevas herramientas para medir cuánto es la evasión por concepto de los arbitrios de cigarrillos, de petróleo y de bebidas alcohólicas.
Así le informó el secretario Juan Zaragoza al titular designado Raúl Maldonado en una primera reunión que ambos sostuvieran ayer como parte del proceso de transición.
“Hablamos de proyectos importantes para darle continuidad a la captación y a la evasión”, dijo Zaragoza, al tiempo que indicó que la meta de Hacienda debe ser medir también la captación en cuanto a los arbitrios de autos y los de la contribución sobre ingresos, tanto de individuos como de corporaciones.
Este año Hacienda dio a conocer una herramienta que mide trimestralmente la captación del Impuesto de Ventas y Usos (IVU). Al presente, la captación es 68%, según Zaragoza.
En la reunión, la cual se extendió por más de dos horas, conversaron también sobre el presupuesto de gasto tributario (“tax expenditure budget”), que es la capacidad que tiene el sistema de generar impuestos, en vez de preparar el presupuesto de acuerdo a los gastos que tiene el Gobierno.
El objetivo con este tipo de presupuesto, señaló Zaragoza, es reevaluar el costo y la necesidad de conceder las exenciones contributivas. “A Maldonado esto le interesó y también las herramientas de captación”, agregó.
Una de las preocupaciones del secretario designado era cuánto es el flujo de efectivo de Hacienda, cuánto dinero debe entrar próximamente y qué desembolsos son prioritarios.
Para que tenga una idea más clara, Zaragoza le entregó a Maldonado una copia del Commonwealth Report, informe que someten los estados que radican emisiones municipales y que Puerto Rico presentó esta semana. “Esta es una buena forma de saber cómo está el Gobierno en términos financieros”, dijo el incumbente.
Hacienda ya envió los reintegros de 2016, con excepción de algunos que tenían errores matemáticos, pero aún le quedan por pagar reintegros de años anteriores.
PAGO A SUPLIDORES. La deuda actual asciende a unos $100 millones, equivalente al pago del último mes, según el secretario. “Los que digan que Hacienda les debe facturas de cuatro meses, no es cierto. Si es de tres o cuatro meses, no es Hacienda, es que la agencia (a la que le dio el servicio o vendió productos) no ha pedido el cheque”, manifestó.
Aunque Maldonado no le ofreció ningún puesto de trabajo al incumbente secretario, sí estuvo receptivo a recibir sus consejos y recomendaciones, reconoció el propio Zaragoza.
Cuestionado sobre cuál es la frustración mayor que siente al cesar sus funciones en Hacienda, el titular no titubeó al decir que es el no haber podido aprobar la reforma contributiva que sustituía al IVU por el Impuesto de Valor Agregado (IVA) y que eliminaba buena parte de la contribución sobre ingresos.
Sobre sus satisfacciones dijo que son muchas. “Pusimos a Hacienda a caminar, la gente ve hoy al departamento de otra manera, se ha modernizado y empezó a fiscalizar”.
CONTINUIDAD A LA FISCALIZACIÓN. Maldonado, por su parte, reconoció como positiva la labor de fiscalización que realizó Zaragoza, y señaló que planifica darle continuidad a esa gestión. No obstante, él desea incorporar el componente de orientación a los empresarios para que sepan cuál es su responsabilidad contributiva.
“Pensamos continuar con los operativos, sobre todo a aquellos que sean reincidentes. Pero voy a enfatizar en el proceso educativo”, dijo el designado secretario.
Explicó que para ello Hacienda entrenará a estudiantes universitarios de Administración de Empresas, que estén en su último año de estudios, y quieran hacer la práctica asesorando a los comerciantes. Maldonado aspira a que esa labor pueda representar la primera oportunidad de empleo para esos jóvenes, y que los comerciantes los retengan en su nómina.
Asimismo, señaló que en el 2017 el departamento añadirá en una primera fase, por lo menos, unos 200 empleados para que realicen labores de fiscalización. Sin embargo, aclaró que los mismos los reclutará de otras agencias de Gobierno, a través del Empleador Único.