Un tesoro de boricuas que le llena de orgullo
Los primeros pasos que ha dado nuestra Dama en Washington es para traer la estadidad. Pretende que nos la otorguen usando el mismo criterio que usó Tenesí para que los admitieran.
No entiendo casi nada de la política establecida por ese estado y el estado de ánimo de los congresistas en aquel momento. Estamos en otros tiempos y quizás esa estrategia no resulte.
Algunos congresistas saben poco de la historia de Puerto Rico. Otros, presumo, no saben nada. Antes de presentarles nuestro Plan Tenesí se les debe llevar el por qué Puerto Rico debe ser un estado y lo que han hecho los puertorriqueños para defender la Constitución de los Estados Unidos.
Se les debe informar sobre la sangre que nuestros soldados han vertido para defender la democracia de esa nación y cómo los puertorriqueños han aportado para ayudar a que Estados Unidos mantenga su nivel.
En mi empeño de conocer más del tema entré en internet a la página de “Famous puertorricans in America”. Accedí a la página de Wikipedia y encontré un tesoro que me llevó a un orgullo que no creía que podía aguantar en mi pecho.
Encontré nombres que no conocía y que han contribuido para la seguridad y el progreso de los Estados Unidos en todas las ramas profesionales y militares.
Esta última sección fue la más impresionante. Refleja los soldados que han participado en las guerras para beneficio de los Estados Unidos. Se reflejan los nombres, rangos y hasta las condecoraciones máximas que fueron otorgadas a estos héroes puertorriqueños. Incluye por ejemplo al teniente Augusto Rodríguez, quien participó en la guerra civil de los Estados Unidos en 1862 y estuvo envuelto en dos grandes combates: Fredericksburg y Van Wyse.
Con estos ejemplos si no somos admitidos, sugiero a los estadistas que desistan pues no hay mejores herramientas para llegar a las metas trazadas.
Convoco, además, a todos los compatriotas para que entren a estas páginas en internet. Se que se sentirán más orgullosos de ser puertorriqueños, como yo ahora me siento. ¡Dios bendiga a Puerto Rico! Ramón López Las Piedras