Trump pide aumentar gastos para la Defensa
El presidente Trump pedirá al Congreso aumentar el presupuesto de Denfensa en un 10% El alza se cubrirá con recortes a otras agencias y reducciones en ayudas para entes extranjeros
WASHINGTON.- El presidente, Donald Trump, prometió ayer un aumento “histórico” del presupuesto para Defensa que será compensado con recortes de gasto en otras agencias federales y en asistencia a terceros países, en la víspera del discurso sobre su “visión optimista” de la nación que dará hoy ante el Congreso.
El día antes de esa intervención ante una sesión conjunta del Congreso, la Casa Blanca adelantó las prioridades de gasto para el año fiscal 2018, que comienza el próximo octubre, que Trump quiere plasmar en el borrador presupuestario que será enviado a los legisladores el 16 de marzo.
El propio Trump, durante un encuentro con la Asociación Nacional de Gobernadores en la Casa Blanca, detalló ayer que ese proyecto presupuestario “de seguridad pública y seguridad nacional” incluirá un incremento “histórico” en el gasto en Defensa para “reconstruir” a las “mermadas” Fuerzas Armadas del país.
De acuerdo con la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca, ese aumento será de casi un 10 % y equivalente a $54,000 millones.
“Tenemos que ganar. Tenemos que empezar a ganar guerras de nuevo”, destacó, por su parte, Trump.
La semana pasada, en un discurso ante la Conferencia anual de Acción Política Conservadora (CPAC), el mandatario ya prometió que EEUU volverá a “ganar” e imponer su poderío militar gracias a un gran aumento del gasto en defensa.
Estados Unidos destina actualmente unos $590,000 millones al año al gasto en Defensa, un 25 % menos que durante la etapa más complicada de las guerras en Irak y Afganistán.
IMPACTO LOCAL Y EN EL EXTRANJERO. En declaraciones a los periodistas, el director de la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, dijo que el plan de gasto de Trump está en línea con su promesa de anteponer los intereses de EEUU a todo lo demás y resumió: “Vamos a gastar menos en el extranjero y más en casa”.
La mayoría del resto de las agencias federales sufrirán recortes para compensar el incremento del gasto en Defensa y Mulvaney hizo énfasis en que se reducirán programas “que no funcionan” y los recursos con los que ayuda EEUU a otros países.
Esa asistencia a terceros países depende del Departamento de Estado representa menos del 1 % del total del gasto del Gobierno federal.
Tras conocerse los detalles de las prioridades presupuestarias de Trump, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, denunció en un comunicado que la propuesta del mandatario impondrá “nuevas cargas” a la clase media y perjudicará, entre otras, a las agencias encargadas de proteger el medioambiente y a los consumidores.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, comentó en su rueda de prensa diaria que los recortes presupuestarios que busca el presidente son “racionales”, al reconocer que también serán “duros”.
Sobre ellos hablará Trump este martes por la noche, en un discurso ante el Congreso en el que ofrecerá su “visión optimista” para el futuro del país, de acuerdo con Spicer.
El portavoz anotó que Trump hablará de las “medidas concretas” que ha tomado desde su llegada a la Casa Blanca el pasado 20 de enero, así como de la “valiente” agenda que quiere sacar adelante con el Congreso y que incluye una reforma fiscal, reconstruir las Fuerzas Armadas y eliminar Obamacare, la reforma sanitaria del expresidente Barack Obama.
“Van a escuchar mucho sobre inmigración mañana por la noche”, anticipó también Spicer acerca de la intervención de Trump. NUEVA REFORMA DE SALUD. Mientras, Trump adelantó que en ese discurso quiere, además, enfatizar su promesa de “arreglar” la infraestructura de EEUU, un ámbito en el que ha prometido gastar e invertir más.
Además de detalles sobre su esperado plan para mejorar las infraestructuras del país, de su discurso se espera una mayor precisión acerca de cómo piensa eliminar Obamacare y reemplazarla por otra ley.
En un encuentro en la Casa Blanca con consejeros delegados de compañías de seguros, Trump insistió ayer en que Obamacare es “un desastre” que ha creado “caos”, al prometer que hará “lo correcto” para los estadounidenses con su eliminación y una “suave transición” hacia una nueva ley sanitaria.
“Nadie sabía que el cuidado de salud pudiera ser tan complicado”, afirmó, no obstante, Trump en una aparente alusión a las dificultades que están teniendo los republicanos para unirse en torno a una alternativa viable a la reforma promulgada por Obama en 2010.
Antes de su alocución ante el Legislativo, el presidente se reunió ayer en la Casa Blanca con los líderes republicanos en el Congreso, Paul Ryan y Mitch McConnell, quienes le expresaron su apoyo para reemplazar Obamacare.
“Tenemos que ganar. Tenemos que empezar a ganar guerras de nuevo” DONALD TRUMP Presidente de los Estddos Unidos