ASUNTO SERIO LA PRESIÓN
Evita a toda costa la hipertensión
Pocas veces presenta síntomas, pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera una de las mayores causas de muerte en el mundo.
Se trata de la hipertensión o presión arterial alta -una enfermedad crónica que se caracteriza por un incremento continuo de la presión sanguínea en las arterias- lo cual es un problema de salud serio que ya se considera una epidemia.
La presión arterial se refiere al nivel de fuerza que ejerce la sangre sobre la pared arterial cuando viaja por las arterias. Esta fuerza se produce cuando el corazón late y bombea sangre por todo el cuerpo.
Por eso es importante conocer la forma correcta y el momento adecuado de tomarnos la presión arterial. Esta se mide usando un aparato que tiene un brazalete que se envuelve alrededor del brazo de la persona, un poco más arriba del codo.
Para tomar la presión se aprieta una bomba que infla el brazalete para obtener el nivel de la presión. Para que la medida esté correcta es muy importante tomar la presión cuando la persona esté sentada y relajada.
La presión arterial se mide con dos números, por ejemplo 120/80 mm Hg (milímetros de Mercurio). El número de arriba (120) representa la presión máxima que se produce en las arterias cuando el corazón late, se le conoce como Presión Sistólica. El número de abajo (80) representa la presión mínima en las arterias cuando el corazón descansa, esto se conoce como Presión Diastólica.
La presión alta se descubre a través de un examen físico de rutina. La mayoría de los profesionales de la salud la diagnostican después de tomar la presión arterial dos o más veces, en tres días diferentes. Cabe resaltar que solamente un médico puede diagnosticar si usted la padece.
Las causas de la presión arterial alta se desconocen en un 95% de los casos. Es lo que se conoce como hipertensión esencial o primaria. Mientras que la presión alta secundaria se debe a otros problemas de salud como diabetes e insuficiencia renal.
Cabe resaltar que practicar ejercicio moderado y adaptado a las posibilidades de cada individuo es una excelente forma de mejorar el control de la presión arterial, además de ayudar con otros factores de riesgo: mejorar la diabetes y el colesterol, y mantener o conseguir un peso adecuado.
La autora es educadora en salud de la División para la Prevención y Control de Enfermedades Crónicas del Departamento de Salud. Más información en: ibis.montalvo@salud.gov.pr.