Lluvia de balas cobra dos vidas
Cuatro personas resultaron heridas en el incidente
Los transeúntes que pasaban ayer por la avenida Isla Verde frente al negocio El Churry, a eso de las 11:00 a.m., miraban con asombro mientras los policías investigaban una balacera ocurrida nueve horas antes y que dejó como saldo dos muertos, cuatro heridos de bala, una mujer con una herida en la cabeza y 98 casquillos recuperados.
La balacera en el concurrido negocio ambulante en Punta Las Marías dejó claro que, al momento de ejecutar a un rival, los sicarios suelen abrir fuego donde sea sin pensar en los inocentes.
Al cierre de esta edición, las víctimas del crimen, quienes viajaban en una camioneta Toyota Tundra, no habían sido identificados por la Policía.
Se recuperaron documentos de ambos en la escena, pero la fiscal María Teresa Carro ordenó que el proceso de identificación se realizara en el Instituto de Ciencias Forenses. DE VISITA EN PUERTO RICO. Sí se supo que uno de los individuos, el conductor, vivía en Estados Unidos y estaba de visita en Puerto Rico. Supuestamente le prestaron la guagua en que viajaban con otro individuo, que cargaba un arma legal en sus manos y trabajaba como empleado de una gasolinera. Se desconoce el móvil del crimen. Según indicó el comandante Luis Pabón Bosques, director del Cuerpo de Investigación Criminal de San Juan, desconocidos a bordo de otro vehículo abrieron fuego contra la camioneta mientras esta pasaba frente al El Churry, donde dos clientes y dos empleados resultaron heridos de bala.
Todos se encuentran en condición estable. Una clienta sufrió una herida en la cabeza al tirarse al suelo.
Agentes de la División de Homicidios de San Juan se concentraban ayer en localizar cámaras de seguridad en el área.
“Hay una situación entre dos vehículos y comienza el tiroteo frente a El Churry… el vehículo (Tundra) choca y hay dos personas muertas. Hay varios heridos en el negocio que no tienen nada que ver como consecuencia de los disparos hacia las víctimas”, dijo Pabón Bosques.
Ningún empleado estuvo disponible para hablar y, al menos hasta el mediodía, nadie de la gerencia había hecho expresiones sobre el incidente que pudo haber tenido un saldo aún más trágico ya que algunas de las balas alcanzaron la estructura del negocio.
Detrás del local se ubicaba un enorme tanque de gas.