Trump apoya proyecto que derogaría Obamacare
Los congresistas republicanos presentaron su propuesta los servicios de salud
WASHINGTON.- El gobierno del presidente Donald Trump apoyó ayer la propuesta republicana presentada para eliminar y reemplazar la ley sanitaria firmada en 2010 por su predecesor, Barack Obama, y conocida como Obamacare, pese al escepticismo que ha despertado ese plan entre algunos congresistas.
Después de que Trump afirmase en su cuenta de Twitter que la “maravillosa nueva ley sanitaria ya está lista para ser revisada y negociada”, su secretario de Salud, Tom Price, compareció ante los periodistas en la Casa Blanca para defender los esfuerzos hacia la derogación de Obamacare.
“El objetivo de todo esto es un cuidado de la salud centrado en el paciente”, enfatizó Price al anotar que Obamacare es un sistema “que no está funcionando” para la mayoría de los ciudadanos.
Esa propuesta, largamente esperada después de las promesas reiteradas de derogación y reemplazo de la ley de 2010, desmantela las disposiciones básicas de Obamacare, incluyendo sus subsidios para ayudar a la adquisición de seguros médicos y la expansión del Medicaid, programa para el acceso sanitario a la gente con bajos recursos.
Asimismo, termina con los mandatos de adquisición de coberturas, que obligaban a los individuos que no contaban con ningún tipo de seguro a comprar uno si no querían ser multados. El plan pretende también generar un sistema de créditos fiscales para incentivar a los ciudadanos a comprar seguros médicos, y eximir a las empresas de tener que ofrecer una alternativa de cobertura a sus empleados.
Pero la propuesta ya ha encontrado detractores en las propias filas republicanas: por un lado, de los congresistas más moderados cuyos estados se vieron beneficiados por Obamacare; y por otro, de los más conservadores como Rand Paul, que la ven como una versión “light” del sistema actual.
“Esto es el comienzo del proceso”, comentó Price sobre la disposición a trabajar con los más escépticos.
Según Price, que afirmó creer que los costos de la atención médica bajarán con el nuevo plan de salud, la mayoría de los ciudadanos no verán un “cambio significativo” en su cobertura y la meta es que los pacientes tengan la opción de seleccionar a sus médicos, así como dar más flexibilidad a los estados para gestionar sus mercados de seguros.
“Estoy trabajando en un nuevo sistema en el que habrá competición en la industria farmacéutica. ¡Los precios para el pueblo estadounidense se rebajarán mucho!”, escribió Trump en un tuit.