Establece prioridades económicas
Antes de decidir sobre algún dilema, debemos conocer cuáles son las necesidades y los deseos.
Tenemos que reconocer que nuestros recursos pueden ser limitados y nuestras necesidades y deseos ilimitados.
El tiempo, el dinero y el espacio son recursos escasos, pero la necesidad de la sociedad para con estos pudiera ser ilimitada. Muchas veces, tenemos que escoger entre varias opciones porque no tenemos el dinero o el tiempo para llevar a cabo todas las alternativas.
Tomamos la decisión después de evaluar las alternativas, comparando los costos con los resultados positivos esperados (los costos no son solo dinero; pueden ser de impacto en la gente, al medio ambiente, a tu futuro, etcétera).
El costo de la oportunidad es el costo de no escoger la segunda alternativa cuando se toma una decisión (lo que dejo, por hacer otra cosa). Te explico.
El factor de la falta de dinero podría influir en las decisiones que tomamos día a día. Un ejemplo puede ser cuando se presentan dos alternativas, como ir a una fiesta o pagar el examen de admisión a la universidad.
Partiendo de la condición de que solo cuento con $ 50, este es el mejor ejemplo de que tenemos recursos limitados y necesidades ilimitadas. Lo ideal sería que, al enfrentarnos a una situación como esta, podamos hacer un análisis de costos y beneficios. Debes tener la prudencia de analizar entre dos opciones que representen algún dilema entre las necesidades y los deseos. NECESIDADES Y DESEOS
Antes de decidir sobre algún dilema, debemos conocer cuáles son las necesidades y los deseos. Las necesidades son los productos y los servicios que uno necesita para sobrevivir, tales como: comida, ropa, alojamiento, etcétera. Por otro lado, los deseos se representan a través de productos y servicios que, en la mayoría de las ocasiones, deseamos adquirir. El dilema surge porque no necesariamente los necesitamos para vivir, puesto que, muchas veces, son cosas materiales, como: una computadora nueva, un carro deportivo o un teléfono inteligente, entre otros. En esos análisis de costo de oportunidad, lo favorable es que reconozcas tus necesidades y deseos. Recuerda que debes analizar las situaciones, evaluar tus alternativas, y plantearte las posibles decisiones y sus respectivos costos de oportunidad.
En segundo lugar, debes evaluar los incentivos que puedes recibir por la posible decisión tomada. Por último, evaluar las posibles consecuencias. Esto podría ayudarte a seleccionar la mejor alternativa, de manera que comprometerás menos tus recursos limitados, como el dinero y el tiempo.
Hoy en día, estamos influenciados por las presiones de comprar, ya sea ropa de marca o lo último en la tecnología. Por lo tanto, nuestras necesidades y deseos deben estar claros para ser responsables con nuestros recursos limitados.
Así que usando el ejemplo anterior, entre dos alternativas como tomar el examen de admisión universitaria o ir a la fiesta, si tienes claro que lo que quieres lograr es un grado universitario, posiblemente vas a decidirte por invertir esos $ 50 en tomar el examen de admisión universitaria. Si no tienes claro cuáles son tus necesidades y deseos, probablemente elegirás ir a la fiesta. El autor es profesor catedrático de economía y negocios en la Universidad del Sagrado Corazón y director de la Alianza para la Educación de Economía y Finanzas Personales.