LLUVIA DE CARIÑO Y AGRADECIMIENTO PARA LOS NUESTROS
La lluvia no fue impedimento para que los subcampeones del Clásico Mundial de Béisbol tuvieran su gran recibimiento
Q Si Puerto Rico hubiera conquistado el campeonato del Clásico Mundial de Béisbol como toda la afición y equipo boricua esperaba, el Centro de Convenciones tal vez se hubiera quedado pequeño para la celebración. ¿O será una falsa percepción? Miles de puertorriqueños abarrotaron el amplio recinto para celebrar desde el mediodía hasta pasadas las 8:30 de la noche, la llegada de la selección nacional de béisbol tras conseguir por segundo torneo consecutivo el subcampeonato, aunque el ansiado trofeo de monarcas se les escapó al perder nuevamente en el juego final, esta vez ante Estados Unidos con marcador de 8-0.
Pero lo que se vivió ayer en el Centro de Convenciones, lo hizo lucir cual si fuera uno de los magnos estadios de Grandes Ligas. Reportes extraoficiales indican que unos 10,000 aficionados se dieron cita a la celebración.
Tras una travesía en caravana desde el Aeropuerto Luis Muñoz Marín bajo una fuerte e incesante lluvia, los presentes que llenaron el Centro de Convenciones vitorearon a #LosNuestros al hacer su entrada.
“De verdad que llegar aquí y ver esa reacción del pueblo de Puerto Rico fue una bendición. Me siento bien contento por esa reacción. Obviamente uno deja todo en el terreno (de juego) y al ver que el pueblo ve eso y está aquí apoyando, de verdad que uno lo aprecia”, dijo el capitán del equipo, Yadier Molina, a El Nuevo Día.
Y lo que más apreció el famoso receptor de Puerto Rico y de los Cardenales de San Luis, fue la muestra de gratitud de la afición a pesar de que la novena boricua no conquistó el título del evento mundial.
“Así mismo (aprecian el trabajo). Llegamos segundos, y ver el apoyo que nos han dado…. Imagínate si hubiéramos ganado”.
El Centro de Convenciones fue aba-
“Estamos bien agradecidos. Es bien bonito ver a un pueblo bien unido. Ustedes no tienen idea” YADIER MOLINA Receptor de Puerto Rico
rrotado por multitud fuera de proporciones. Esa misma multitud estalló en júbilo tan pronto el dirigente del equipo subcampeón del Clásico Mundial de Béisbol, Edwin Rodríguez, se subió a la tarima cerca de las 5:30 de la tarde y alzó su puño cerrado mientras Andy Montañez y su orquesta tenían su intervención musical. Fue una de tantas agrupaciones musicales que intervinieron en la maratónica celebración.
El veterano intérprete del género tropical pidió repetir el popular tema “Quien no se siente patriota” cuando llegó el equpio. Fue el mejor acompañamiento musical a la entrada triunfal del bautizado ‘Team Rubio’.
Fue la manera de encender de verdad el fiestón que comenzó desde an- tes del mediodía, cuando ni siquiera la selección había pisado suelo boricua.
Mientras Rodríguez se gozaba en tarima, bailando y mostrando la medalla que colgaba sobre su cuello, los peloteros subían hasta la planta superior del Centro de Convenciones, provocando otra ensordecedora reacción de la multitud que con banderas de Puerto Rico en alto vociferaba.
Con celulares en mano, los miles de presentes le dieron casi la espalda al espectáculo musicial de Andy Montañez para comenzar a tomar vídeos cuando vieron a los jugadores hacer su entrada. Mientras los integrantes del equipo subcampeón del mundo subían a la planta superior para un agasajo y soltar su equipaje y otras pertenencias, muchos de ellos respondieron de igual manera sacando sus teléfonos para tomar imágenes del momento, apuntando a la multitud. Uno de los últimos en subir fue Molina, quien al quitarse su gorra y hacer el gesto que se convirtió en la marca del Clásico Mundial 2017 cada vez que Puerto Rico conectaba un batazo importante o anotaba una carrera, hizo delirar al pueblo que se desbordó ayer para celebrar como si su equipo se hubiera alzado el miércoles en Los Ángeles con el título. APOYO INCONDICIONAL. “Anoche por lo que estábamos jugando era por la unión de Puerto Rico, y eso se logró”, dijo luego el dirigente Rodríguez cuando regresó a la tarima cerca de las 7:00 de la noche, esta vez acompañado de los 12 jugadores que vinieron a la Isla en el vuelo fletado desde Los Ángeles.
“Oigan, oigan, estoy bien contento…”, pronunció Molina siendo interrumpido por los presentes con un coro repetido de “MVP, MVP, MVP”.
“Lo de MVP no fui yo…”, respondió Yadier, cuando la gente lo dejó hablar. “Fueron todos mis compañeros de equipo, incluyendo al ‘coaching staff’, incluyéndolos a ustedes que nos apoyaron. Estamos contentos… gracias por este recibimiento. Anoche jugamos y pasó lo que pasó. A las dos horas nos montamos en el avión desde Los Ángeles a Puerto Rico. Llegamos a Puerto Rico ‘to’ chavaos. Pero cuando llegamos aquí, que vimos todo esto, se me fue el sueño, se me fue el cansancio”, respondió Molina, provocando la ensordecedora aprobación del público. “Lo que vimos fue mucha alegría. Estoy bien agradecido con cada uno de ustedes, por el apoyo que nos dieron”.
Después de unas breves palabras de Rodríguez y del capitán del Team Puerto Rico, Yadier, Tito el Bambino se subió con ellos a la tarima para realizar su intervención musical, que incluyó un reto para poner a competir bailando al lanzador Edwin ‘Sugar’ Díaz, a uno de los coaches, Carlos Baerga, y a Yadier.
“Fue un gran recibimiento. Me siento bien de estar aquí y que el equipo (Seattle), me dio el ‘break’ de venir. Pudimos unir un pueblo que era lo que queríamos, y está todo el mundo contento, que es lo más importante”, dijo por su parte Díaz.