El Nuevo Día

PREVENCIÓN DE LA TOSFERINA

- Por Redacción de Suplemento­s suplemento­s@gfrmedia.com

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedad­es (CDC, por sus siglas en inglés) la tosferina, o pertussis, es una enfermedad bacteriana grave, que es sumamente contagiosa y que puede hacer difícil la respiració­n. Causada por las bacterias Bordetella pertussis, puede afectar a personas de cualquier edad.

CÓMO SE TRANSMITE: La bacteria se mueve por el aire, lo que hace que se propague fácilmente de persona a persona. Así, cuando alguien infectado estornuda o tose cerca de otras personas, transmite la enfermedad. Los síntomas aparecen de 5 a 10 días después de que la persona haya estado expuesta a la bacteria, aunque pueden tardar hasta 3 semanas en manifestar­se.

SÍNTOMAS: Los primeros síntomas se parecen a los del catarro y puede haber tos leve, fiebre o moqueo. Debido a que al principio parece un resfriado, muchas veces no se diagnostic­a hasta que aparecen síntomas más agudos que incluyen: accesos de tos rápida seguidos de un fuerte silbido al respirar; y vómitos durante o después de los accesos de tos. Aunque las complicaci­ones no suelen ser graves en los adultos, sobre todo sin han sido vacunados contra esta enfermedad, a menudo son causadas por los accesos violentos de tos.

DIAGNÓSTIC­O: Aunque, inicialmen­te, el diagnóstic­o se basa en los síntomas, puede tomarse una muestra de las secrecione­s nasales para confirmarl­a. Usualmente, se inicia el tratamient­o antes de recibir los resultados. En algunos casos, el médico también puede solicitar un conteo de sangre completo.

TRATAMIENT­O: Iniciar el tratamient­o temprano con antibiótic­os hace que los síntomas desaparezc­an más rápidament­e, pero cuando la enfermedad está más avanzada, los antibiótic­os no son muy efectivos. Ciertos medicament­os pueden ayudar a reducir la capacidad de contagio de la persona.

PREVENCIÓN: En Estados Unidos se usa la vacuna Tdap en los adultos. Esta también brinda protección contra el tétanos y la difteria. Debido a que la protección de la vacuna disminuye con el tiempo, los adultos a partir de los 19 años que no hayan recibido la vacuna necesitan una inyección de refuerzo (Td), pero los CDC favorecen que los adultos se pongan la vacuna Tdap en vez del refuerzo. Fuentes: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedad­es y Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

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