Incierto futuro para los fondos Medicaid
El Congreso recesa sus trabajos por dos semanas, sin aclarar el panorama para la Isla
WASHINGTON.- El Congreso inicia hoy un receso legislativo de 18 días que deja en el limbo la decisión sobre cómo atender el abismo fiscal en fondos de Medicaid hacia el que va el sistema de salud de Puerto Rico, que, según los datos más recientes del gobierno, se concretará en octubre.
A partir de entonces, en noviembre y según el análisis oficial, al gobierno se le acabaría el dinero del presupuesto para Medicaid cuando todavía quedarían ocho meses para el fin del año fiscal y $886 millones por cubrir.
A finales de este mes, se espera que el Congreso anuncie un paquete de fondos adicionales para Medicaid, y las autoridades puertorriqueñas están a la expectativa de si incluirá a la isla, lo que ayudaría a mantener el servicio de salud que utilizan 1.4 millones de pacientes en Puerto Rico.
La incertidumbre se agrava pues los Centros de Servicios para Medicaid y Medicare (CMS) han pedido al gobierno de Puerto Rico que presente este mes las propuestas de contratos con los planes médicos de Mi Salud.
Inicialmente, CMS dio a la Administración de Seguros de Salud (ASES) de Puerto Rico hasta el 1 de abril para entregar las propuestas, pero el gobierno de la isla solicitó una extensión hasta mediados de mes.
Por suspender sus trabajos hasta la semana del 24 de abril –la Cámara baja recesó ayer y el Senado lo hará hoy–, para mediados de mes no se sabrá si el liderato republicano del Congreso accederá a incluir en la resolución presupuestaria que se debe aprobar antes de que termine este mes una asignación puente para extender el financiamiento de Medicaid que Obamacare ha provisto a Mi Salud.
Fuentes indicaron que el análisis de ASES señala que en octubre el abismo fiscal del sistema de salud será de $886 millones como consecuencia del agotamiento de los fondos de Medicaid que ha asignado la ley Obamacare. “Para noviembre, estamos en negativo”, confirmó ayer el director ejecutivo de la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico (Prfaa), Carlos Mercader.
Con o sin la ley Obamacare, los cerca de $6,400 millones en fondos de Medicaid que han sido utilizados para financiar casi la mitad del presupuesto de Mi Salud se acabarían en octubre.
“Puerto Rico experimenta condiciones económicas graves y un fracaso en atender el abismo fiscal de Medicaid será devastador y causará más estragos”, indicó la congresista boricua Nydia Velázquez (Nueva York).
Velázquez divulgó ayer una carta que envió el miércoles –junto a otros 73 demócratas de la Cámara baja– al speaker Paul Ryan para acentuar la presión hacia el liderato republicano del Congreso a favor de la extensión de los cerca de $1,200 millones que ha provisto Obamacare al sistema de salud de Puerto Rico.
La carta la firman, entre otros, los boricuas José Serrano (Nueva York), Luis Gutiérrez (Illinois) y Darren Soto (Florida), y líderes del caucus demócrata como el portavoz adjunto, Steny Hoyer (Maryland).
“No atender el abismo fiscal también resultará en emigración adicional al continente, donde el costo de proporcionar servicios de Medicaid es mucho mayor que en la isla”, indicaron los legisladores demócratas.
Recordaron además que el Grupo de Trabajo del Congreso sobre Desarrollo Económico en Puerto Rico –del cual Velázquez formó parte– alcanzó un acuerdo bipartidista en diciembre pasado en favor de atender el precipicio fiscal de Medicaid.
En una reunión en marzo, tras Puerto Rico quedar fuera de la reforma federal de salud que aún tratan de aprobar los republicanos, el speaker Ryan dijo a la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, y a los congresistas republicanos Carlos Curbelo (Florida) y Sean Duffy (Wisconsin), que la resolución presupuestaria de abril o la reautorización del plan de salud infantil que debería ratificarse a más tardar en septiembre, pueden ser vehículos para los fondos de Medicaid.
La semana pasada, sin embargo, la portavoz de la minoría demócrata en el Comité de Asignaciones del Senado, Patty Murray (Washington), dijo a preguntas de El Nuevo Día que el liderato del Congreso parece inclinado a mantener la resolución, que terminaría de asignar los fondos del año fiscal federal que termina en septiembre, “lo más sencilla posible”, por lo que será “muy difícil lograrlo”.
El Plan fiscal del Gobierno de Puerto Rico, certificado por la Junta de Supervisión Fiscal que controla sus finanzas, no cuenta con la extensión de los cerca de $1,200 millones anuales en fondos de Medicaid que ha otorgado Medicare, lo que agrava el panorama fiscal para el próximo presupuesto de la isla.
Mercader, representante del gobernador en Washington, sostuvo que “hay conversaciones positivas”, pero también reconoció que “ante el ambiente político que tenemos en el Congreso, la situación es un reto”.
“Puerto Rico experimenta condiciones económicas graves y un fracaso en atender el abismo fiscal de Medicaid será devastador” NYDIA VELÁZQUEZ congresista demócrata