Llueven las advertencias en medio de tensión por Corea del Norte
Estados Unidos asegura que se tomarán medidas si el régimen Kim Jong Un continúa con las pruebas balísticas y el desarrollo de armamentos nucleares
PANMUNJOM, Corea del Sur. Pyongyang acusó ayer a Estados Unidos de estar empujando a la península coreana hacia la guerra y avisó de que está preparada para responder a cualquier acción militar de Washington.
“Si EE.UU. se atreve a optar por una acción militar (...), la República Popular Democrática de Corea (RPDC) está lista para reaccionar a cualquier tipo de guerra que desee EE.UU.”, aseguró el embajador adjunto del país ante la ONU, Kim In Ryong, en una conferencia de prensa en la sede de Naciones Unidas.
Kim aseguró que el Gobierno de Donald Trump busca “hacer algo” en Corea del Norte y por ello está desplegando fuerzas en la región.
El representante norcoreano destacó el reciente ataque lanzado por EE.UU. contra una base aérea siria como prueba de que Washington es una amenaza para Estados soberanos bajo el pretexto de trabajar por la paz.
“Estados Unidos está perturbando la paz y estabilidad globales e insistiendo en una lógica de gángster”, aseguró Kim, que acusó a la administración estadounidense de querer aplicar a su país la misma doctrina que a Siria.
Por su parte, el presidente Trump declaró que su mensaje a Corea del Norte es “más vale que se comporten”, un día después de un intento fallido de los norcoreanos por lanzar un misil.
En conferencia de prensa en la Casa Blanca en Washington, un reportero de CNN le preguntó al mandatario cuál era su mensaje para el gobierno de Kim Jong Un, y la respuesta fue, “más vale que se comporten”.
Horas antes el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence viajó a la tensa franja que separa a Corea del Norte y Corea del Sur y, a pocos metros de sus rivales, advirtió a Pyongyang en contra de probar a Washington y Seúl con sus ambiciones nucleares.
Pence hizo una visita no anunciada a la Zona Desmilitarizada al inicio de su gira de 10 días por Asia, en una demostración de fuerza de Estados Unidos que permitió al vicepresidente observar a los soldados norcoreanos desde lejos y mirar directamente al otro lado de la frontera, delimitada por alambre de espino.
Haciendo referencia al cuarto de siglo transcurrido desde la primera vez que Washington se enfrentó a Corea del Norte por sus intentos de construir armas nucleares, Pence dijo que había habido un periodo de paciencia.
“Pero la era de la paciencia estratégica se acabó”, declaró Pence. “El presidente Trump ha dejado claro que la paciencia de Estados Unidos y nuestros aliados en esta región se ha agotado y queremos ver cambios. Queremos ver como Corea del Norte abandona su imprudente camino en el desarrollo de armas nucleares. El uso continuo y las pruebas de misiles balísticos es inaceptable”.
Más tarde, Pence dijo en un comunicado conjunto con el presidente interino de Corea del Sur, Hwang Kyo-ahn, que el compromiso de Washington con su aliado es “férreo e inmutable”. Reiteró que “todas las opciones están sobre la mesa” para abordar la amenaza y apuntó que el uso de cualquier arma nuclear por Pyongyang recibirá “una abrumadora y efectiva respuesta”. HABLAN OTRAS POTENCIAS. Entretanto en Moscú, el canciller ruso Serguei Lavrov dijo a reporteros que espera “que no haya acciones unilaterales como la que vimos recientemente en Siria, y que Estados Unidos se atenga a lo expresado repetidamente por el presidente Trump durante la campaña electoral”.
Por su parte China se expresó a favor de reiniciar las negociaciones con Corea del Norte. El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Lu Kang dijo que se deben reducir las tensiones en la península coreana para que la disputa allí pueda encontrar un final pacífico. Añadió que Beijing desea reanudar las negociaciones multinacionales que quedaron estancadas en el 2009, y dio a entender que los planes estadounidenses de implementar un sistema de defensa antimisiles en Corea del Sur están perjudicando sus relaciones con China.
En Tokio ayer, el primer ministro japonés Shinzo Abe dijo ante una sesión del parlamento que “no hay necesidad de decir que los esfuerzos diplomáticos son importantes para mantener la paz. Pero el diálogo sólo por el diálogo no tiene ningún sentido. Necesitamos aplicar presión sobre Corea del Norte para que responda con seriedad al diálogo”.