Acceso universitario y la intermedia
Las destrezas para la universidad se fomentan desde temprana edad
La preparación universitaria no empieza en escuela superior. Un joven que ha sido alentado desde su niñez a imaginar su futuro, a desarrollar sus talentos y a pensar en la universidad, tendrá más interés en establecer metas educativas y prepararse para lograrlas. Tanto padres como maestros son esenciales en este proceso, pero a veces desconoce cuál es el mejor momento para iniciarlo.
En la Fundación Kinesis ofrecemos servicios de preparación universitaria desde 7mo grado. Más allá de completar cursos preparatorios, tomar pruebas estandarizadas y sacar buenas notas, los estudiantes necesitan destrezas sociales, hábitos de estudio, organización y aprender a valerse solos.
En la escuela intermedia los estudiantes están en etapa de exploración personal y tienen la capacidad de desarrollar destrezas de vida, necesarias para llegar a la universidad y hacer una transición exitosa de adolescentes a universitarios. EN EL HOGAR. Es esencial que se les enseñe a empoderarse, a conocerse y a tomar decisiones positivas sobre su futuro académico. Los padres deben fomentar actividades extracurriculares, como trabajo voluntario, clases de arte, música y deportes. También deben empezar un diálogo con sus hijos sobre metas y expectativas profesionales. Los jóvenes suelen estar más atentos a escoger una carrera, mientras que los padres tienden a preocuparse por cómo pagar la universidad. No importa dónde desee estudiar el joven, habrá cambios económicos en el núcleo familiar. La responsabilidad económica no debe recaer exclusivamente en los padres.
Deben crear un plan como familia para explorar opciones de estudio, visitar universidades, identificar fechas del proceso de admisión, ahorrar, investigar becas y entender cómo se solicita asistencia económica. EN LA ESCUELA. Así como los niños pequeños imitan y asumen roles rápido, los más grandes se van identificando con lo que ven en el salón de clases. Cuando los estudiantes ven la pertinencia de lo que están aprendiendo y empiezan a identificar lo que les gusta, ya están creando una conciencia sobre sus metas, su futuro y la universidad. ACTIVIDADES. Actividades que los maestros pueden realizar en 7mo y 8vo grado: 1. Autoconocimiento: Un ejercicio de completar una oración o de escribir un breve ensayo siguiendo la pauta “Cuando sea grande quiero ser…” los invitará a considerar sus intereses, gustos, capacidades y aspiraciones. Informa a tus estudiantes sobre actividades extracurriculares, clubes y servicio voluntario en la escuela para que tengan varias experiencias. 2. Hábitos de estudio y organización: Comparte cuestionarios y ejercicios con tus alumnos para que descubran cómo aprenden y ofréceles estrategias básicas para cada estilo de aprendizaje: visual, auditivo, sensorial, etc. Estas herramientas se consiguen en internet sin costo. Otra opción es darles un calendario de las tareas y los temas que se cubrirán en el año para que preparen una agenda de trabajo al empezar cada mes. 3. Definir metas: En el salón hogar pueden establecer objetivos y proyectos comunes. Por ejemplo, mantener un espacio verde o eliminar el uso de botellas plásticas. Alienta a los estudiantes a establecer una meta personal al principio del semestre. 4. Destrezas de socialización: Tomar decisiones como clase, es un buen aprendizaje sobre las dinámicas de grupo: escucharse, tener empatía y encontrar consenso. Escoger el color de camisa para el día de juego es un ejemplo. El trabajo en equipo es otra buena actividad para fomentar la socialización. Crea oportunidades de tareas compartidas. Mezcla los grupos para evitar que los estudiantes solo compartan con sus amigos.
Cada estudiante debe empoderarse de su ruta a la universidad. Aunque los padres tienen la labor principal de guiarlos y alentarlos, crear una cultura universitaria es responsabilidad de todos. Cuando nos involucramos, nos convertimos en propulsores del desarrollo de las futuras generaciones y del futuro de Puerto Rico.