Debate de candidatos a la vicepresidencia. “Pence pareció más presidencial”
El senador demócrata de Virginia, Tim Kaine, y el republicano Mike Pence, gobernador de Indiana, intercambiaron golpes sobre varios temas desde el aborto hasta Rusia, durante el debate vicepresidencial en la Universidad de Longwood en Farmville, Virginia, el 4 de octubre. Pero también fue una noche para que Kaine demostrara por qué Donald Trump no es apto para convertirse en presidente y para que Pence tranquilizara a los votantes republicanos tradicionales después de unas semanas tumultuosas.
Fletcher McClellan, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Elizabethtown, Pennsylvania, EE. UU., comparte con Metro su visión sobre el debate vicepresidencial.
¿Qué hemos aprendido del debate? — No estoy seguro de que hayamos aprendido mucho. Oímos en varias ocasiones los puntos de campaña, con Kaine atacando las polémicas declaraciones de Trump acerca de diversos grupos y Pence criticando los correos electrónicos de Clinton y su actuación como Secretaria de Estado. Los partidarios de ambos candidatos presidenciales se aseguraron de que sus respectivos candidatos a VP estaban calificados para servir como presidente.
¿Cuáles fueron los puntos principales del debate? — Kaine fue agresivo durante todo el debate, señalando que Pence no podía defender los comentarios despectivos de Trump sobre mexicanos y mu- jeres, su elogio a Vladimir Putin, y su negativa en liberar sus declaraciones de impuestos. Pence condenó la caracterización de Clinton de los partidarios de Trump como “deplorables”, y caracterizó tanto a ella como al presidente Obama como líderes de la política exterior débiles. De varias formas esto fue más como un tradicional debate demócrata-republicano, con Pence apoyando los recortes de impuestos para los ricos, la desregulación y las leyes contra el aborto y Kaine abogando por un salario mínimo más alto, control de armas, y la libertad reproductiva.
¿Quién ganó el debate? — Pence se mantuvo compuesto a lo largo de las frecuentes interrupciones de Kaine. En ese sentido, Pence pareció más presidencial. Además, Pence planteó temas sobre Clinton que Trump no pudo hacer durante el primer debate presidencial. Por último, Pence utilizó diversas estrategias para hacer frente a los ataques de Kaine sobre Trump, incluyendo la negación, haciendo caso omiso a Kaine, e indicando sus propias posiciones, un cuanto diferentes, sobre los temas.
¿Quién perdió? — Kaine perdió en el estilo, adoptando el papel del perro que ataca con demasiada ansiedad. Por otra parte, tuvo éxito en mantener a Pence a la defensiva y hacer el punto más importante que gran parte de lo que Trump ha dicho es indefendible.