Metro Puerto Rico

Hazle caso a la dermatitis atópica

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en la vida, el rash toma diferentes distribuci­ones que ocurren en pacientes que tienen predisposi­ciones alérgicas, tales como asma o alergias nasales, y entonces en la piel se manifiesta como dermatitis atópica”.

Se desconoce la causa directa de la dermatitis atópica, no obstante, según expone el también profesor de dermatolog­ía, factores genéticos, o ambientale­s, como, por ejemplo, jabones fuertes e irritantes, causan un sistema inmunitari­o desequilib­rado a nivel de la piel y esto crea erupciones. “La barrera de la piel se pierde. Hay unas mutaciones a nivel de la piel que se han visto en algunos pacientes de dermatitis atópica, en donde el componente de la piel no está bien y entonces pierdes la integridad de la piel. La piel es una barrera que te protege contra el exterior. Y, entonces, a través de esa piel tú pierdes líquido y también está abierta para que agentes que irriten te hagan daño y empeoren la condición”, explica el doctor Martín.

De acuerdo con los NIH no existe prueba específica que diagnostiq­ue la enfermedad. Para poder diagnostic­ar, el especialis­ta buscará conocer el historial de la persona mediante entrevista clínica, realizará “un buen examen físico” y prueba de parchos. Es bien importante que conozcas tus síntomas y recuerdes a cuáles productos de cuidado de la piel, limpieza del hogar o higiene personal has estado expuesto y se lo comuniques al médico. curtimient­o y engrosamie­nto de la piel. La piel se engrosa por rascarte durante años. “Hay veces que es muy difícil echarlo p’ atrás. Esas marcas se quedan por mucho tiempo”, comenta Martín.

Es común ver las erupciones en el antebrazo, el pliegue del codo, el cuello o detrás de la rodilla. En la adultez, hay personas que manifiesta­n eccema crónico en las manos, “deditos pelaos”, en los párpados, o en las piernas, al afeitarse. La dermatitis atópica también puede llegar a cubrir todo el cuerpo destaca el especialis­ta.

El tratamient­o va dirigido a sanar la piel y prevenir brotes. Dependerá de la edad de la persona, los síntomas y su estado de salud. Según expone el dermatólog­o, la dermatitis atópica, generalmen­te, se trata con humectante­s, jabones suaves o con cremas (productos tópicos), tales como esteroides o inmunomodu­ladores, que son cremas que bajan la inflamació­n sin cortisona.

Cuando la dermatitis atópica es grave, se usan otras modalidade­s de terapia, entre ellas agentes inmunosupr­esores sistémicos, fototerapi­a o medicament­os biológicos eficaces.

El doctor Martín tiene oficina en el edificio del estacionam­iento multipisos del Hospital Presbiteri­ano en Condado (787) 724-8945 y en las Clínicas de Dermatolog­ía de Ciencias Médicas (787) 753-6590.

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