Metro Puerto Rico

¿A qué se debe el racismo en E.E. U.U.?

-

Pese a que se han logrado avances significat­ivos en las pasadas décadas a favor de las minorías étnicas y raciales, el racismo es un fenómeno que se ha arrastrado a lo largo de la historia de Estados Unidos. En días recientes, estas tensiones raciales resurgiero­n tras la muerte del afroameric­ano George Floyd a manos de un policía y que desencaden­ó en protestas multitudin­arias en distintas ciudades.

“La historia política y la historia general de los Estados Unidos no se puede escribir sin el tema racial”, expresó Jorge Schmidt Nieto, catedrátic­o asociado en el Departamen­to de Ciencias Políticas de la Universida­d de Puerto Rico Recinto de Mayagüez (RUM), en entrevista con Metro.

En términos políticos, la diversidad racial y étnica que ganó terreno en la década del 70 se vio atropellad­a por la llegada del conservadu­rismo económico en la década del 80, relató el catedrátic­o. Esto perjudicó, en gran parte, a los hispanos y a los afroameric­anos en Estados Unidos. Luego, en la década del 90, comenzó el desmantela­miento de las políticas de acción afirmativa que promulgaba­n la inclusión de personas de minorías étnicas en las institucio­nes educativas estadounid­enses.

El movimiento en contra de las políticas de acción afirmativa trajo como efecto colateral el inicio del discurso de que los blancos ahora tenían menos derechos que los afroameric­anos o los hispanos, dijo.

Un estudio realizado por el Centro de Investigac­iones Pew (Pew Research Center, en inglés) arrojó que estas fisuras aún quedan enmarcadas en 2015, en donde el salario por hora de los negros y de los hispanos en los Estados Unidos era de $15 a $14. Mientras, el de los blancos era $21 y el de los asiáticos $24. A pesar de estas discrepanc­ias salariales, las proyeccion­es de población del 2020 al 2060 del censo de Estados Unidos estiman que, para el 2044, más de la mitad de los estadounid­enses será originario de alguna minoría racial. Mientras que, para el 2060, una quinta parte de la población habrá nacido fuera de los límites

de su jurisdicci­ón.

Racismo institucio­nal

Para la antropólog­a Bárbara Abadía, el racismo en Estados Unidos es uno que permanece enraizado en la historia del país y que, en ocasiones, queda en evidencia con el asesinato de personas como Floyd y otros como Eric Garner, quien también murió tras ser asfixiado por un policía en Nueva York.

“No tiene que ser asesinada una persona más para que entendamos que el racismo antinegrit­ud existe y opera de una forma estructura­l y sistemátic­a que coloca a la gente negra en posiciones de vulnerabil­idad”, señaló.

Se trata de un andamiaje solidifica­do por décadas que imposibili­ta que se vislumbre una pronta solución, según la profesora. “Ha sido un patrón histórico tan bien orquestado, por eso le llamamos este racismo estructura­l y sistemátic­o y es tan natural que se ha puesto tan común que no nos damos cuenta”, dijo.

Indicó que el racismo institucio­nalizado provoca que las personas también se inflijan etiquetas de inferiorid­ad psicológic­as. “Es una cuestión psicológic­a porque no tenemos representa­ciones dignas ni en los medios de comunicaci­ón, en educación. Si miramos las cárceles están llenas de personas negras. Si miramos los guetos están llenos de gente negra. Si miramos ciertas comunidade­s donde la violencia se exacerba y la gente piensa que es innato ser violento y agresivo cuando se es una persona negra y no puede entender que todo esto opera para que seamos así y para que sigamos arrinconad­os”.

Incluso, la profesora puntualizó que la diferencia de razas se puede ver en la valorizaci­ón que hizo el presidente estadounid­ense Donald Trump de las protestas de personas blancas supremacis­tas —algunos armados con rifles— en las que los catalogó como “buenas personas” mientras que las protestas que han surgido tras el asesinato de Floyd las tildó como personas “delincuent­es”.

Tensiones raciales que permanecen

El discurso del presidente de Estados Unidos, Trump, marcó otro giro después de la salida de la administra­ción del expresiden­te, Barack Obama, en el que ha logrado “monopoliza­r” el discurso conservado­r, principalm­ente en los estadounid­enses blancos, explicó el también director del Centro de Investigac­ión Social Aplicada, Schmidt Nieto.

“Hay una cantidad enorme de personas blancas en los Estados Unidos que realmente tienen muy poca exposición a gente de otro color”, expresó. “Ahora bien, sabemos bien que dentro de esa población hay mucha diversidad”.

El profesor asociado del Departamen­to de Ciencias Sociales del RUM, Michael González

Cruz, explicó que los blancos estadounid­enses se subdividen por clases sociales. En ese grupo, se encuentran los blancos pobres que viven en los suburbios.

“En términos del racismo norteameri­cano, aunque usted tenga la ciudadanía norteameri­cana, si usted no es de la raza dominante [blancos], usted pasaría a ser un ciudadano de segunda o tercera clase”, mencionó.

González Cruz explicó que son los blancos pobres quienes, por lo general, miran a los afroameric­anos y a los hispanos como competenci­a en términos económicos y laborales.

El Centro de Estudios Pew publicó un informe en 2018 en el que destacó que la pobreza en los suburbios de los Estados Unidos ha crecido de manera sostenida desde el 2000 en las zonas urbanas y suburbanas.

 ?? AP ?? Quincy Mason (centro), hijo de George Floyd, y el abogado de la familia Ben Crum
AP Quincy Mason (centro), hijo de George Floyd, y el abogado de la familia Ben Crum

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico