De Georgie Navarro a Kanny… a Deddie
La semana pasada surgió una controversia por unas expresiones del representante Jorge Navarro Suárez, “Georgie”, sobre la vestimenta de la presentadora Deddie Romero en el programa “PR En Vivo” (TeleOnce).
¿Qué hizo el representante? Se quedó mirando el escote de Romero para luego cuestionar, a modo de broma, su vestimenta y expresar “Hoy voy a almorzar pechu pops”. Honestamente, yo no sé en qué está pensando el representante. Era predecible que lo ocurrido crearía una controversia innecesaria para una persona que se queja de que no respetan a los políticos.
Hace unos meses, luego de ser agredido físicamente por tercera o cuarta vez en público, se quejó de que ciudadanos le pierdan el respeto a los políticos “por ser políticos”. ¿Realmente es por ser políticos? Sí, hay políticos que han tenido que enfrentar críticas de ciudadanos cuando se los encuentran en la calle. Sin embargo, ¿cuántos políticos han sido agredidos físicamente en los pasados años, y con frecuencia? ¿Ha visto usted a alguien tratando de agredir a Thomas Rivera Schatz, a Carlos “Johnny” Méndez, a Juan Zaragoza, a Jesús Manuel Ortiz o a Rafael Bernabe?
Si a Georgie Navarro lo tienen de punto en la calle, me temo que no es simplemente por ser político. En su caso, me sospecho que puede ser porque él mismo no da a respetar su posición, y, si él no la respeta, ¿cómo pretende que los demás lo hagan? Y no me mal interpreten. Nada, absolutamente nada justifica que él fuera agredido como trascendió hace unos días. Mi planteamiento no es que él se busca las cosas, más bien es que le han perdido el respeto por sus propios actos porque no hemos visto a nungún otro legislador siendo agredido tantas veces en la calle.
Navarro fue criticado por la cantautora Kany García, quien expresó que lo que hizo el representante del PNP fue una “asquerosidad total”. Su crítica es totalmente comprensiva; su selectividad, no necesariamente. Ante la crítica, Navarro dijo que ella no podía criticar porque era ella quien le cantaba al “amigo en el baño”. ¡Por favor! Claro que puede criticar. En la democracia, hasta una crítica selectiva se puede hacer, y la canción a la que se refiere no tiene que ver con la problemática del machismo.
De otra parte, el representante recordó que García no se expresó cuando trascendieron las denuncias de hostigamiento contra la mujer en el Partido Independentista Puertorriqueño, estableciendo que la cantautora tiene doble vara a la hora de defender a la mujer. Yo desconozco si se expresó en aquel entonces o no. Por lo menos en una búsqueda cibernética no encontré alguna expresión de su parte.
Ahora bien, sí, cuando uno quiere respeto a la mujer en una sociedad machista, la búsqueda de esa justicia debería ser en el sentido amplio y sin contemplaciones, venga de donde venga. Tomemos dos ejemplos. Navarro dijo “Esa no es la vestimenta para “El Cuadro de Georgie”… Yo horita voy a almorzar unos pechu pops”. Debemos suponer que para García y otras figuras que se han unido a la crítica, el problema principal, más que de quién viene, es el impacto que tiene una expresión así en un medio de difusión masiva y en la lucha por erradicar el machismo. Sin embargo, es sepulcral el silencio de estas figuras cuando es un Bad Bunny expresando “Si tu novio no te mama el cul…, pa’ eso que no mame” o “Vino ready ya, puesta pa’ una cepillá’, me chupa la lollipop, solita se arrodilla…”. Ahí no preocupa tanto o, mejor dicho, no preocupa nada el impacto en la sociedad.
¡Ah! Es que Bad Bunny lo dice relajando, no se puede tomar literal, es parte de una canción. Bien, en el caso de Georgie Navarro, que fue parte de un libreto, ahí no, ese hace daño al intento de erradicar el machismo, pero el de Bad Bunny es sano, todos lo entienden es relajo y no tiene efecto. Esos argumentos son parte de la hipocresía y la selectividad que tampoco aportan a resolver problemas como el machismo. El que tiene agenda, obviamente buscará establecer que lo de Navarro es más grave y que tiene más impacto que un Bad Bunny en sus millones de seguidores, pero es eso, parte de la agenda.
Independiente de… el legislador es dueño de sus actos y los mismos tienen consecuencias, por lo que debe hacer una introspección de si sus actos, o algunos de estos, van acorde con su posición.