¿Motivar a la base o atraer a los votantes indecisos?
Abogado estadista
Una buena parte de los analisis políticos giran en torno a cuál de esas estrategias debería tener prioridad en las campañas. Los que estamos pendientes a los que transcurre en Washington en este momento, estamos presenciando un experimento en tiempo real sobre cuál funciona mejor. Los republicanos de la Cámara de Representantes parecen estar apostando su mayoría a motivar a subase de votantes conservadores. Por el contrario, el presidente Biden, que movió a la izquierda durante los primeros dos años de su presidencia, ha comenzado el año con pasos hacia el centro mientras prepara una campaña de reelección que aún no ha sido anunciada pero que claramente está en marcha.
El flanco debil de los republicanos en las elecciones de mitad de termino quedo
evidenciado cuando una parte significativa de los votantes en el centro del electorado, independientes y moderados, los vieron como extremistas, según indican las encuestas a boca de urna. Esa creencia de que los republicanos eran “demasiado extremos” fue una de las principales razones por las que los demócratas pudieron contener sus pérdidas entre los votantes que estaban molestos por el estado de la economía. Los ayudantes de Biden y otros demócratas están viendo esas mismas encuestas y claramente tienen la intención de hacer de las acusaciones de extremismo republicano un elemento central de su campaña durante los próximos dos años.
Se ganan las elecciones sumando, no restando, pero los republicanos están tan motivados por lo que impulsa a una franja
estrecha de su base que están perdiendo la capacidad de apelar a la mayoría del país. La agenda republicana es “sobre lo que enciende las redes sociales de derecha”, en lugar de temas que la mayoría de los votantes consideran prioritarios.
Los funcionarios de la Casa Blanca comparten ese sentimiento y han trabajado para crear contrastes. Cuando los republicanos de la Cámara estaban enredados en su batalla interna por la presidencia, Biden viajó a Kentucky para apoyar al líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, y promocionar la ley de infraestructura bipartidista que proporciona dinero para mejorar un puente importante .
Alejandro Figueroa