El PPD en el que creo
Puerto Rico vive un panorama de incertidumbre. Por los pasados siete años, tres gobernadores del PNP han puesto su agenda ideológicaporencimadeldesarrollodelpaís. Su prioridad es la estadidad y, escudados detrásdeeseidealimposible,hanpermitido–y enocasionesfacilitado–eldeteriorodenuestro desarrollo socioeconómico. La indignacióndelpueblopuertorriqueñohahechoimpostergablequeelPartidoPopulartengauna ref lexión profunda sobre su misión y visión para encarar al PNP y ser el propulsor de un nuevo país.
El giro que ha tomado nuestra elección especial interna me ha confirmado lo que por añoshevenidoescuchandoenlacalle.Elpaís está cansado de la política tradicional y reclamaunatransicióndelideratoyuncambioen
nuestra misión como partido. Para esto hay que reconocer valientemente y con humildad los fallos que hemos tenido como institución y movernos sin titubeos hacia una nueva visión del gobierno del futuro.
El cálculo político no debe ser la idea principal de nuestro desarrollo como partido ni como país, sino todo lo contrario. Es el buen gobierno,ladefensahonestadelascausasen laquecreemos,yelempleojustodenuestras prerrogativas como líderes electos en mejorar la calidad de vida de nuestra gente, lo que nos traerá la aceptación del pueblo a nuestra gestión pública. Este es el PPD en el que yo creo.
Hoy nos toca a una nueva generación hacer lo propio para transformar nuestra institución política de cara al futuro, tal y como lo hizo nuestro jíbaro puertorriqueño enfrentando la industrialización, educándose y transformándose para ser herramienta de cambio en nuestra sociedad. Seamos profundos y honestos en nuestras propuestas sin importar las críticas. Tengamos la capacidad de tomar las decisiones correctas para inspirar a esa nueva generación de líderes de nuestropartidoaquenosayudenaconstruir nuestronuevoproyectosocial,talycomolo hizo Don Luis Muñoz Marín en el 1938.
Acompáñame este próximo domingo, 7 de mayo a poner al PPD en esta posición. Estoylistoparaejecutarunproyectodefuturo para el PPD. ¡Sal a votar popular!