La inmigración y las elecciones presidenciales
Durante una década, comenzando con la reelección del presidente Obama y de manera acelerada durante el cuatrienio de Donald Trump, los demócratas se movieron hacia la izquierda en el tema de la inmigración, restando importancia a la vigilancia fronteriza y defendiendo los derechos de los inmigrantes a buscar asilo en Estados Unidos. Durante un tiempo, la mayoría de los estadounidenses se movió con ellos. Las duras medidas migratorias impulsadas por Trump, especialmente la separación de niños de sus familias en la frontera, generaron una intensa reacción entre los votantes.
Las encuestas durante el mandato de Trump encontraron un aumento constante de estadounidenses que estaban a favor de que se flexibilizaran los controles de inmigración y la legalización para aquellos que habían entrado a Estados Unidos sin documentos.
Todo eso ha cambiado.
A medida que el número de inmigrantes que cruzan la frontera sur de EE. UU. ha aumentado a niveles récord, el apoyo público a la inmigración ha disminuido, incluso entre los demócratas. Los republicanos, por su parte, han utilizado el tema para vapulear a la Administración del presidente Biden y esto, a su vez, ha dividido a los demócratas.
La respuesta demócrata, de Casa Blanca hacia abajo, ha sido abogar por una vigilancia fronteriza más estricta. Sin embargo, en las últimas semanas, la extralimitación republicana en el tema ha dado una oportunidad a los demócratas. La victoria del martes del demócrata Tom Suozzi en una elección especial del Congreso para ocupar el escaño que anteriormente ocupaba el republicano George Santos sirvió de ejemplo de cómo explotar esto. Los estrategas del partido claramente esperan desplegar tácticas similares en distritos indecisos de todo el país para la elección de noviembre.
La propuesta que combina la legalización para los inmigrantes que llevan una cantidad de tiempo considerable residiendo en EE. UU. con una aplicación más estricta de las restricciones de entrada en la frontera– contrastaría marcadamente con la posición republicana sobre la inmigración.