PREGUNTAS FRECUENTES
Una doctora experta en lactancia y organizaciones de salud responden algunas de las dudas más comunes sobre el proceso
Cuando se trata de lactar, “un mal comienzo puede derrocar el proceso. Yo recomiendo que todo el mundo se prepare”, dice la doctora Yvette Piovanetti, quien es pediatra especialista en lactancia. Al quedar embarazada, la también coordinadora de lactancia para el Capítulo de Puerto Rico de la Academia Americana de Pediatría (AAP), explica la importancia de que, además de seleccionar un proveedor de salud, se escoja con anticipación qué pediatra atenderá al bebé, que incluso pudiera ser uno o una especialista en lactancia.
“El chequeo de esos primeros cincos días posteriores a cuando se da a luz, el pediatra contestará esas dudas o preguntas que surgen y para que se le dé un buen seguimiento”, añadió.
A continuación, incluimos cuáles son esas preguntas más frecuentes que rondan en la cabeza, particularmente de las madres, acerca de la lactancia materna y otras relacionadas con este tema y el COVID-19.
¿Debo lactar cada dos horas?
Cada bebé es diferente. Los patrones de alimentación de los bebés amamantados (la cantidad y la frecuencia y durante cuánto tiempo se alimentan) dependerá de sus necesidades. Es posible que tu bebé quiera comer con una frecuencia de 1 a 3 horas. Esto varía y probablemente cambia a medida que crecen y comienzan a comer más alimentos sólidos. La alimentación frecuente ayuda a aumentar el suministro de leche y le permite al bebé practicar la succión y la deglución.
¿Estaré dando suficiente leche?
En esos primeros días el bebé no necesita mucha cantidad de leche con cada alimentación para llenarse debido a que el estómago de un recién nacido es muy pequeño. No necesita mucha cantidad de leche con cada alimentación para llenarse.
La mayoría de los bebés que reciben leche materna no deben ser alimentados con fórmula infantil en los primeros días de vida. Si te preocupa satisfacer las necesidades de tu bebé, habla con un asesor de lactancia, el personal de enfermería o el médico de tu bebé de inmediato para averiguar cómo abordar cualquier problema con la lactancia materna y determinar la mejor manera de satisfacer las necesidades de tu bebé.
¿Amamantar es doloroso?
Amamantar no produce dolor. Si el bebé está bien colocado y hay un buen agarre entre mamá y bebé, la lactancia no va a ser dolorosa. Si el bebé se le agarra mal al pecho repetidamente, succionando del pezón sin introducirse gran parte de areola en la boca, probablemente tendrás molestias cada vez que lo amamantes, y que los pezones se irriten o agrieten.
Si tu bebé se ha agarrado correctamente al pecho, es posible que sienta dolor durante unos 30 a 60 segundos (cuando el bebé tire del pezón y de la areola para introducírselos en su boca), pero después el dolor debería desaparecer. Si sigues teniendo dolor, interrumpe momentáneamente la lactancia y vuelva a colocarte el bebé en el pecho. Si persiste el dolor, es que probablemente pasa algo más.
¿Es seguro amamantar en tiempos de COVID-19?
Las mamás pueden empezar y prolongar exitosamente la lactancia materna durante la pandemia siguiendo ciertas precauciones recomendadas. En todos los entornos socioeconómicos, la lactancia materna mejora la supervivencia de los neonatos y lactantes, y les proporciona beneficios para la salud y el desarrollo que duran toda la vida. La lactancia materna también mejora la salud de las madres. En cambio, no se ha detectado la transmisión del virus de la COVID-19 a través de la leche materna ni el amamantamiento. Por tanto, no existen motivos para evitar la lactancia materna ni interrumpirla.
¿Mi bebé puede seguir amamantándose o tomando la leche materna extraída si doy positivo a COVID-19?
Sí, los bebés pueden seguir tomando la leche materna, aunque obtengas un resultado positivo del COVID-19. Hasta la fecha no se ha detectado el virus activo de COVID-19 (es decir, que pueda causar infección) en la leche de ninguna madre con sospecha o confirmación de COVID-19. Por lo tanto, parece poco probable que la enfermedad pueda transmitirse al amamantar o a través de la leche materna extraída de una mujer considerada caso sospechoso o confirmado de COVID-19. Los investigadores continúan analizando la leche materna de mujeres con COVID-19, presunta o confirmada.
Antes de amamantar directo del pecho, lávate las manos con agua y jabón antes de cargar a tu bebé y usa una mascarilla o cubierta de tela para la cara mientras amamantas. Si vas a extraer la leche, usa tapabocas, lávate las manos bien y limpia bien todas las partes del extractor, biberones y chupones artificiales.
Después del parto, ¿debo colocarme inmediatamente al bebé piel a piel para amamantarle si existe sospecha o confirmación de que padezco de COVID-19?
Sí. El contacto piel a piel inmediato y continuado, incluyendo la técnica de la «madre canguro», mejora la regulación de la temperatura de los neonatos y varios otros indicadores fisiológicos y se asocia a una mayor supervivencia neonatal. Además, colocar al recién nacido junto a la madre permite una iniciación temprana de la lactancia materna, lo que también reduce la mortalidad. Los numerosos beneficios del contacto piel a piel y la lactancia materna superan ampliamente los posibles riesgos de transmisión y enfermedad asociados a COVID-19.
¿Puedo lactar si tomo algún medicamento?
A pesar de que muchos medicamentos pueden pasar a la leche materna, la mayoría no afectan el suministro de leche materna o el bienestar de los bebés. Puedes buscar más información sobre medicamentos específicos en LactMed® del CDC. Habla con tu médico si tienes preguntas o preocupaciones relacionadas a tomar medicamentos mientras estás lactando.
Fuentes: Academia Americana de Pediatría (AAP), Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), Organización Mundial de la Salud (OMS)