HORA DE MIMARSE

Saca tiempo para ti sin que te sientas culpable:

Ellas trabajan, son madres, esposas y prácticamente la cabeza del hogar. A pesar de que muchas son las responsabilidades, hacen un espacio en sus respectivas agendas para sacar tiempo y mimarse, sin sentirse culpables.

No importa la actividad que tengan, ya sea deportiva, casual o formal, Marilyn Delerme, Imara Rodríguez y Blamaris Miranda siempre buscan la manera de verse bien.

Además, las tres coinciden en que mientras mejor se sientan, más motivadas y contentas pasarán su día. Y sus hijos y esposos también se alegrarán de verlas en esa onda.

En cuanto al tiempo que se dedican, aprovechan para compartir con sus amistades, irse de shop

ping, ejercitarse, ir al salón de belleza o hacerse un facial. Claro, que cuando los niños están recién nacidos, reconocen que la rutina se complica, pero entienden que no debe ser excusa para que las mujeres se descuiden.

“El mero hecho de tener hijos no significa que tú no te arregles, al contrario, es cuando mejor te deberías ver para que tus hijos vean que tienen una mamá linda a su lado. Es disciplina y cuestión de organizarte, porque el tiempo va a aparecer. Tú tienes que sacar ese tiempo y ese tiempo es sagrado, es para ti”, dice Imara Rodríguez.

La también abogada de profe-

sión compartió que hace su ritual de relajación, de recargar energías y distraer la mente los sábados, cuando se levanta a las 5:00 de la mañana, para correr con un grupo de madres que, al igual que ella, hacen un sacrificio para ejercitarse. Luego se tongonean con un desayuno amistoso.

“Ese es el tiempo para yo hacer mis ejercicios. En la semana igual, me levanto dos veces a hacer ejercicios a las 5:00 de la mañana porque si no lo hago a esa hora es más complicado. Pero ese es mi tiempo y mi momento (por eso el sacrificio de levantarse tan temprano)”, cuenta en entrevista con Primera Hora. Orgullosa de ser madre de gemelos de nueve años, agrega que “yo por el mero hecho de arreglarme, querer verme bien, no estoy descuidando a mis hijos. Por eso yo me organizo para poder estar en todas sus actividades y a la vez sacar tiempo para mí”.

“Como me dice mi marido: ‘Una mamá feliz, es un esposo feliz y son unos niños felices’. Y si mamá está feliz todos estamos felices”, anota. En el caso de Blamaris Miranda, quien es madre de cuatro varones de 20, 14, 13 y 6 años de edad, la manera de consentirse es en el salón de belleza cuando se tiene que teñir el cabello, hacer la manicura y pedicura. Hasta las citas médicas las calendariza para que no conflijan con las actividades extracurriculares de sus vástagos. “Estoy cumpliendo conmigo y no los estoy desatendiendo”, sos- tiene la joven madre que labora en un laboratorio clínico.

“Esto es como dicen las azafatas, que uno tiene que ponerse primero la máscara de oxígeno para poder ayudar a los demás. Nosotras como madres tenemos que cuidarnos bien para poder estar saludables y en condición para poder cuidar a nuestros hijos...”, acota la licenciada.

En tanto, Marilyn Delerme, quien es madre de cuatro niñas, de 13, 12, 10 y 8 años, asegura que “nunca me he sentido culpable de arreglarme porque hasta embarazada sacaba tiempo para sentirme bien y verme bonita, y hay que sacar provecho de las cosas”.

Para la quiropráctica “el tiempo que nos dedicamos a nosotras es una inversión para sentirnos bien con nosotras mismas. Una mujer que se siente bien consigo misma lo proyecta, la hace ver coqueta, hermosa, alegre, interesante y segura de sí misma. Valoro, atesoro demasiado ese tiempo y espacio para mí”.

Señala que “el sentimiento de culpa es un enemigo que se antepone a que te sientas feliz y te sientas mujer. Debemos sacar el tiempo y el espacio para hacer cosas que nos agraden”.

Siente también que es importante hacer actividades para liberar el estrés y salir de la rutina como el arreglarse. Su inspiración para siempre estar exacta ha sido su madre y su abuela que le decía: ‘Siempre tienes que ponerte tu polvito en la cara’”.

Sus niñas están emulando el preocuparse por verse bien porque “ellas mismas me piden esmaltes y copian la rutina de belleza. Pienso que la apariencia es algo muy importante”, precisa.