DIO EL SALTO
Joel Curbelo se estrena como árbitro en el BSN
Justo hace 10 años, el excanastero Joel Curbelo protagonizó uno de los sucesos más agrios de reciente memoria entre un jugador y un árbitro en una serie final del Baloncesto Superior Nacional (BSN).
Se jugaba el séptimo y decisivo partido de la final de 2007 entre los Cangrejeros de Santurce y los Capitanes ante cerca de 18,000 fanáticos que llenaron el Coliseo de Puerto Rico, cuando Curbelo, de los arecibeños, le dio un ‘empujoncito’ con el pecho al oficial Jorge Vázquez, que le costó ser expulsado del partido en la primera mitad.
Pero el mundo da muchas vueltas y ahora Curbelo milita del otro lado con el uniforme de negro al convertirse en árbitro hace dos años y medio, y ahora está debutando en el BSN, a sus 42 años.
“La realidad es que ambos somos amigos”, dijo Curbelo entre risas, recordando el incidente con Jorge Vázquez. “Jorge fue mi jefe en la temporada siguiente (2008) cuando fue gerente general en Ponce (con los Leones). Ahora estoy del otro lado, donde estaba Jorge. Simplemente salgo a la cancha y trato de hacer el mejor trabajo posible para que no pase incidente alguno. Salgo a marcar y que el juego se dé como es, sin problemas”, dijo el exjugador a Primera Hora.
Curbelo, de paso, se convierte en el jugador de más impacto en el BSN en dar el salto como oficial. Jugó 16 temporadas y acumuló 5,482 puntos para una media de 13.4. Incluso, fue el líder de anotaciones en el 1995 con Carolina con 25.4 puntos por juego. También fue miembro del Equipo Nacional que ganó el oro en el Preolímpico de 1995 y jugó en las Olimpiadas 1996. Se retiró en el 2008 con Ponce.
Según Curbelo, su interés por laborar como árbitro surgió hace cerca de tres años, cuando el oficial Axel Coll le hizo un acercamiento.
“Todo comenzó un día que me encontré con Axel Coll y me hizo el acercamiento. Al inicio le dije que tenía que pensarlo, que no estaba seguro. Al tiempo lo llamé y le dije ‘lo voy a hacer’. Y desde entonces estamos en esto”, dijo Curbelo.
Para ser árbitro, Curbelo primero tuvo que certificarse y entonces comenzar a tener experiencia en categorías menores para poder luego aspirar a fungir dentro del BSN.
“Primero me certifiqué como árbitro Nivel II para trabajar categorías intermedias, como juvenil y primera categoría hasta que llegó la invitación a juegos de fogueos del BSN este año. Había interés del BSN , lo hice bien y les gusto mi trabajo”, recordó Cubelo.
“Entonces me avisaron y estuve súper contento. Yo era uno de los candidatos y estaba preparándome. Estuve deján-
dome llevar de los que saben y por Axel Coll. Me gusta lo que estoy haciendo y me lo estoy disfrutando. Gracias a Dios ya llegué a ese objetivo, que es el BSN, son las ‘grandes ligas’ a nivel local. Es un placer estar de este lado”.
En el BSN ya lleva cuatro partidos y, por el momento, todo ha corrido sin problemas.
“La disciplina en el juego se trabaja con los jugadores. Es día a día. Hay que aprender a cómo se manejan las situaciones con los jugadores. Hay algunos que puedes hablar con ellos, pero con otros no. Algunos hay que tratarlos con más carácter, con otros no”, dijo sin mencionar nombres.
“Son cosas que se hablan en reuniones de grupo, de cómo manejar a los jugadores. Con los dirigentes es igual. Tratamos de no hablar con ellos. En la medida que se abre la puerta para hablar con ellos, pues se hace. A veces no saben por qué marcamos y damos explicación. Hasta ahora no he tenido ninguna situación difícil con nadie”, aseguró.
En condición física
Si cree que la profesión de árbitro es un ‘mamey’ y solo caminar la cancha, se equivoca.
Según relata Curbelo, tiene que seguir trabajando su condición física.
“A nosotros nos exigen mantenernos en condición. Tienes que mantenerte corriendo, estirando, alzando pesas en la medida que puedas durante los días que no tienes juegos. Hasta tenemos que pasar unas pruebas físicas que dictamina la FIBA”, dijo Curbelo.