OTRO CAFECITO PARA YADIEL RIVERA
Curiosamente, cuando fue subido la pasada semana, se convirtió en el único boricua de los Cerveceros
Las cosas en el clubhouse de los Cerveceros de Milwaukee han cambiado bastante desde que Yadiel Rivera estuvo por última vez en septiembre del pasado año.
El 4 de septiembre pasado, Milwaukee jugaba para 60-76 y estaba cuarto en la Central de la Liga Nacional, a 28 juegos de los Cachorros de Chicago, eventuales ganadores de la Serie Mundial.
Cuando recibió la primera llamada la semana pasada, el boricua subió a un equipo que juega para 50-41, en el tope de la división y a 5.5 juegos de los Cachorros y de los Cardenales de San Luis.
“Obviamente estoy súper contento de que me volvieron a llamar a las Grandes Ligas y más ahora que el equipo está ganando. Contento, y esperando poder aportar a que sigamos ganando”, sostuvo Rivera a Primera Hora.
El jugador del cuadro, oriundo de Caguas, fue reclamado desde la filial Triple A de la organización cuando el también ‘infielder’ Eric Sogard tuvo que ser colocado en la lista de lesionados por 10 días debido a problemas con un tobillo.
Aunque dijo que no habló del tema con el dirigente Craig Counsell, Rivera sabe que el llamado esta vez será tan largo como dure la lesión de Sogard.
“Pues a menos que alguien más se lastime la opción es regresar a Triple A. Con la lesión de Sogard necesitaban en el banco a alguien que jugara todas las posiciones del cuadro y el otro es Hernán Pérez, que ya está jugando”, explicó Rivera.
Y estar en un equipo ganador no le pone mayor presión, porque afirmó que tiene muy claro el trabajo que tiene que hacer.
Counsell dijo a medios locales de la ciudad que Rivera les brindaba velocidad en las bases y defensa. Este bateaba para .231 con tres jonrones y 29 remolcadas con el equipo Colorado Springs en 68 partidos.
La otra cosa que extrañó al llegar al clubhouse fue no encontrarse a un solo puertorriqueño, incluyendo al receptor Martín ‘Machete’ Maldonado.
“Fue bien raro no haberme encontrado a Machete. Lo estoy viendo desde que firmé con Milwaukee (2010). No tenerlo conmigo fue súper extraño, pero uno trata de llevarse bien con los dominicanos, venezolanos y otros latinos”, manifestó.
El naguabeño Maldonado firmó en el 2007 con la organización y fue su receptor sustituto por varias campañas hasta que fue canjeado a los Angelinos en diciembre pasado.
En temporadas recientes, jugadores boricuas como Rivera, Maldonado, los receptores Juan Centeno y René García y los lanzadores Jorge López e Hiram Burgos se han puesto el uniforme de los Cerveceros con el equipo grande.
Siendo el único, y sabiendo que la oportunidad podría ser corta, Rivera está enfocado en hacer lo suyo y ayudar al equipo a ganar.
“Hay que hacer el trabajo y el resultado se verá. Entiendo que para tener un ‘break’ de jugar todos los días tendría que ser que alguien se lastime o sea cambiado. O podría ser que suceda como le pasó a Maldonado”, expresó Rivera.
Tras llegar a Anaheim, Maldonado se adueñó de la receptoría de la novena y al momento está rumbo a establecer los mejores números ofensivos de su carrera.
“El jugar regular ayuda a uno, porque no hay tanta presión de tener que demostrar algo. Juegas todos los días y sabes que si fallas hoy, mañana vas a tener la oportunidad de hacerlo bien”, reflexionó.
Y aunque extraña a Maldonado y está solo en el equipo grande, recordó que el sistema de liga menor está repleto de boricuas como López, Burgos, García, el lanzador Andrew Barbosa y el infielder Iván de Jesús Jr.
“El equipo está bueno y nos faltan un montón de peloteros que están en las Menores, así que creo que vamos por buen camino. Ahora estamos ganando, pero cuando suban todos los prospectos que están en las Menores vamos a estar mucho mejor”, finalizó.