Dueño de su destino
Un pleito en Rusia con Khabib Nurmagomedov y UFC debutando allí podría superar los dos millones de ventas de PPV’s
¿Qué le depara el destino a Conor McGregor luego de su pelea con Floyd Mayweather? ¿Seguirá en el boxeo o volverá a UFC?
A juzgar por el resultado del sábado en la noche, probablemente el irlandés opte por hacer ambas.
La realidad es que a pesar de caer vía TKO ante Mayweather en el décimo asalto, McGregor lució mucho mejor como boxeador que lo que muchos pensaban y en su debut pugilístico ante el mejor libra por libra del mundo hizo una pelea más interesante y competitiva de lo que hicieron veteranos como Juan Manuel Márquez y Manny Pacquiao.
De hecho, conectó 111 golpes en nueve asaltos y medio, superando los 82 de un Pacquiao ultraconservador con 81 en 12 asaltos y los 72 de Márquez en 12 asaltos.
Pero definitivamente tiene bastante espacio para mejorar si su aspiración es buscar otros nombres grandes, como el ganador entre Saúl ‘Canelo’ Álvarez y Gennady Golovkin. Ahora mismo no sería lo recomendable, pues no está en esa liga a nivel boxístico.
Sin embargo, que a nadie le quepa duda que McGregor masacraría a cualquiera de esos en una jaula de UFC, sea porque los inmovilizaría a patada limpia a las piernas o porque tendría la opción de agarrarlos y llevarlos al piso. Inclusive, ante Mayweather cogió su espalda súper fácil en multiples ocasiones. En MMA eso implicaría un derribe seguro o una estrangulación.
Pero ciertamente, si McGregor aspira a boxear ocasionalmente debe buscar un entrenador de boxeo cotizado que complemente a su grupo de trabajo. Eso sí, no descartaría un pleito ante alguien de menor nivel como, su ‘sparring’ Paulie Malignaggi.
Por lo pronto, su enfoque debe estar en regresar a UFC y dominar las 155 libras, pues desde que ganó la correa de manos de Eddie Álvarez a fines del 2016 no la ha defendido.
Un pleito en Rusia con Khabib Nurmagomedov y UFC debutando allí podría superar los dos millones de ventas de PPV’s. Y debe probarse además ante el ganador del título interino de 155 libras que disputarán Tony Ferguson y Kevin Lee en octubre en UFC216.
En UFC hará buen dinero, pues en el 2016 consiguió cerca de $40 millones por sus dos peleas con Nate Díaz y su pleito con Álvarez. Él siempre vende sobre un millón de PPV’s y la mayoría de sus ganancias vienen por regalías de esas ventas.
Claro está, tras hacer sobre $100 millones ante Mayweather, el boxeo será una tentación para hacer más dinero. Nadie de los púgiles actuales le garantizará una bolsa como esa, pero de seguro se buscará ocho cifras con cualquiera que desee pelear. Por eso lo veo haciendo ambas cosas, aunque más en UFC.
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