DAÑOS GRAVES POR IRMA EN CUBA
El paso del huracán Irma por Cuba dejó una estela de destrucción que tomará largos meses y muchos recursos para recuperarse, sobre todo en la infraestructura eléctrica y en los daños a la industria turística, su principal motor económico.
Mientras Irma seguía su periplo por la península de la Florida y zonas aledañas, en Cuba trataban de botar el golpe con la mayor rapidez posible y poder comenzar un proceso de recuperación que será desafíante.
El inventario de daños por el paso del huracán, que fluctuó en su paso por Cuba entre las categorías 3 y 5, recién inicia y no hay datos oficiales, pero una mirada general a lo ocurrido sitúa los recursos necesitados en cientos de millones de dólares.
El primer gran desafío está en la red de energía eléctrica, que fue dañada en casi la totalidad del territorio y requerirá de importantes inversiones para su recuperación.
El presidente Raúl Castró Ruz reconoció que el sistema eléctrico ha sido impactado en todo el país y ordenó el uso de brigadas especiales para levantar la infraestructura en el menor tiempo posible.
El segundo gran daño causado por Irma está en la infraestructura hotelera. El huracán golpeó tres de los principales polos turísticos del país con una furia particular.
La Habana, la capital y principal atrayente de turismo; el polo playero de Varadero, el más importante de su tipo en el país; y el sistema de islas conocidas como Los Cayos, el cual sigue a Varadero en interés en el sector de playa e instalaciones todo incluido, resultaron con daños.
En La Habana, todo el litoral del Malecón, desde los barrios de Centro Habana hasta Vedado, se inundó y el mar penetró hasta 11 calles adentro; ayer en la tarde el agua comenzaba a retirarse, tras casi 24 horas.
“Esto es un desastre. Siempre el agua se mete, pero esta vez subió como nunca y dañó cuanta cosa encontró”, dijo Ana María González, residente en el Vedado.
El Caribe
Antigua y Barbuda y las Antillas Menores buscaban ayer cómo resurgir tras recibir dos huracanes, Irma y José, en el espacio de cuatro días, dejando unos 29 muertos.
En Haití, miles de personas permanecían en alojamientos temporales, principalmente en el norte, la zona más perjudicada por Irma, y que dejó un desaparecido y dos heridos, además de daños materiales.