TRABAJAN A PULMÓN LOS HOSPITALES
Han tenido que ingeniárselas ante la falta de agua y luz, pero sobre todo por no tener diésel
Daños en las estructuras, necesidad de combustible y limitaciones en las visitas a pacientes han sido algunas de las secuelas del huracán María en los hospitales del País.
En algunas instancias personal hospitalario ha tenido que abandonar sus funciones normales para ir de gasolinera en gasolinera buscando abastos de diésel, para asegurar que los servicios de salud no se interrumpan.
Por el momento, los hospitales solo están haciendo operaciones de emergencias y atendiendo nacimientos.
En el Hospital Doctor’s Center en Bayamón, por ejemplo, el potente ciclón les arrebató el techo, por lo cual tuvieron que remover a todos los pacientes del cuarto y quinto piso. A otros los tuvieron que trasladar a hospitales cercanos, como el Bayamón Health Center, cuando se quedaron sin diésel, dijo María Marte, administradora del hospital.
Las emergencias que más están recibiendo en los últimos días son traumas por golpes o caídas, y personas que necesitan servicios de ortopedia.
Según indicó Norberto Correa, director médico del hospital, también se reciben muchos adultos mayores dependientes de abastos de oxígeno para sobrevivir.
En el Puerto Rico Chidren’s Hospital en Bayamón, las operaciones quedaron alteradas debido a problemas con su generador eléctrico por lo que se acordó trasladar los pacientes al adyacente Hospital Hermanos Meléndez, explicó Norma Machado, directora ejecutiva del hospital.
“Tenemos muchos pacientes críticos”, dijo. “Además, hay pacientes que damos de alta y se quedan porque no tienen donde ir o no pueden llegar a sus casas”.
La buena noticia es que el Centro Médico, ya tenían luz, dijo Jorge Matta, director de Administración de Servicios Médicos. Sin embargo, el principal centro de servicios de salud terciarios del país opera aún con cisterna.
En el Hospital Bella Vista, en Mayagüez, la planta sigue operando porque sus em- pleados han logrado adquirir diésel al detal en gasolineras de la zona, informó el gerente general del hospital, el pastor Luis Rivera.
Mientras, el hospital de Camuy reabrió sus puertas ayer luego de cerrar sus operaciones el jueves por los daños en el techo del edificio, informó el ayudante del alcalde, Nelson Hernández.
“Ya tenemos dos médicos para brindarle servicio a la gente de Camuy y de otros pueblos. Ya se arregló la parte afectada del techo y (ayer) se abrió el mismo. La única situación que tenemos es la falta de diésel. Solo tenemos para operar hasta mañana (lunes)”, dijo Hernández.