HOSPITALES ESTÁN EN CONTRA DEL RELOJ
ENTRAN EN ACCIÓN Distribución de diésel alivia, pero no es solución estable
CAGUAS. El hospital HIMA San Pablo de Caguas ha recibido cientos de pacientes sobre lo normal debido a que nunca dejó de operar pese al paso del huracán María.
La institución hospitalaria no ha rechazado a ninguna persona, incluyendo a quienes llegan desde los hospitales que han cerrado o reducido sus funciones, pero ya enfrenta la presión de los recursos que han comenzado a escasear y los temores de seguridad.
Con el diésel de su planta a poco más de un día para agotarse, recibieron ayer con los brazos abiertos a dos tanqueros de la Reserva del Ejército de los Estados Unidos.
“El despacho de este combustible para nuestro hospital en Caguas es sumamente significativo”, expresó Marangely Matos, oficial de calidad y cumplimiento corporativo. “Como único hospital que está operando en la región de forma normal… nos mantiene en operación”.
Habían hecho la orden el sábado, pero dada la enorme demanda tras el huracán, no fue hasta ayer que les pudo llegar.
Los militares han entrado en el panorama para tratar de ayudar con la crisis, transportando el diésel desde las instalaciones de PUMA en Cataño. Y, aunque sirve de alivio, el largo proceso por el que tienen que atravesar para el llenado de los tanques y el traslado no se presta para una solución única para la crisis.
Además del papeleo y los problemas de comunicación - especialmente con los hospitales que están fuera del área metropolitana -, se suman las consideraciones de logística de seguridad. Una decena de oficiales armados del Negociado de Investigaciones Especiales escoltaron a los tanques hasta Caguas.
Matos dijo que con los
“
En un día le dimos diálisis a 119 personas, que es algo exhorbitante” HEIDI RODRÍGUEZ VICEPRESIDENTA HIMA SAN PABLO DE CAGUAS
6,000 galones de diésel que recibieron ayer y los 8,000 que ya tenían, San Pablo consigue al menos “una estabilidad de cinco días en lo que el gobierno ponga su estrategia a correr y empecemos a operar normalmente, nosotros y el resto de los hospitales”.
Su suplidor es Transfuel, pero al estar en Mayagüez ha tenido problemas de comunicación y transporte del combustible.
Pero el acelerado consumo del generador no es la única preocupación. Por la alta demanda sobre lo normal, su pozo de agua está a unos días de que secarse, pese a que la urbanización aledaña ya tiene el servicio de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados.