UN RETO DIARIO DAR SERVICIO EN HOSPITALES
La limitación de combustible y la falta de comunicación son los obstáculos principales para que las instituciones médicas puedan operar
Los principales hospitales de Arecibo y Manatí mantienen sus servicios clínicos, aunque garantizarlos ha representado un reto diario debido a las limitaciones de combustible para operar sus generadores eléctricos, así como también para la movilización del personal, especialmente los que ofrecen servicios directos de salud, reconocieron sus portavoces. Además, la falta de servicio tele- fónico ha dificultado las comunicaciones con los servicios de ambulancia, con los suplidores y colaboradores de las instituciones hospitalarias.
A estos problemas, se les suma el lento recogido de cuerpos en las morgues que, en un momento, provocaron complicaciones para mantenerlos en neveras en algunos de estos centros de salud.
A pesar de estas dificultades, el Doctors’ Center Hospital, el Manatí Medical Center, el Hospital Pavía Dr. Cayetano Coll y Toste y el Hospital Metropolitano Dr. Susoobservaban ni mantienen sus servicios en sus unidades clínicas, incluyendo sus salas de emergencia y cirugía.
“Solo las áreas administrativas y servicios ambulatorios no han podido operar” en el Doctors’ Center Hospital, indicó Karen Álvarez Nazario, directora corporativa de Relaciones Públicas de esta institución.
Este hospital de Manatí tenía ya servicio de agua potable pero no de electricidad. En tanto el Manatí Medical Center funciona con cisternas y generadores de energía. Al menos en la PR-2, ayer se brigadas de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) en labores de restauración cerca de ambos hospitales. No obstante, ni Álvarez Nazario ni José S. Rosado Santos, administrador del Manatí Medical sabían cuando tendrán sus hospitales energizados a través de la Autoridad.
No obstante, el administrador del Manatí Medical Center señaló que han suspendido las visitas a los pacientes y solo permiten que los pacientes tengan un acompañante. La misma regla opera en el Dr. Cayetano Coll y Toste, indicó su relacionista público, Ada Soto.
En Manatí Medical Center hay 176 pacientes y 50 en sala de emergencias. Mientras que el hospital Cayetano Coll y Toste tenía hoy 124 pacientes ingresados.
“Los abastos que tenemos son para los pacientes”, dijo Rosado Santos al explicar que tomó esa determinación cuando se prolongaron los días sin el restablecimiento del servicio de agua y luz.
Aunque las instituciones están realizando cirugías, han pospuesto aquellas que son electivas o que no comprometen la salud del paciente. En tanto, el Hospital Metropolitano Dr. Susoni limitó sus cirugías debido a los daños que el huracán María provocó a la estructura. Las cirugías más complicadas se refieren al Hospital Pavía Dr. Cayetano Coll y Toste, que pertenece al mismo grupo corporativo.
Los portavoces de los hospitales de Manatí señalaron que sus morgues sobrepasaron su capacidad pero que como las funerarias ya han comenzado a operar, la situación se normaliza poco a poco. El Hospital Dr. Cayetano Coll y Toste no confrontó esa situación, pero Soto, quien también es portavoz del Dr. Susoni no supo precisar cómo se encontraba la morgue de ese hospital arecibeño.
Las cuatro instituciones tienen abastos de combustible para los próximos dos o tres días. Hasta ahora, lo han conseguido a través de suplidores privados o mediante la intervención de las autoridades gubernamentales.
En tanto, las limitaciones en los abastos de agua, provocaron que el Hospital Pavía Dr. Cayetano Coll y Toste, así como el Manatí Medical Center no ofrezca los servicios de diálisis ambulatorios y solo ofrezcan el servicio para los pacientes internados que necesiten de este tratamiento.
Racionan el diésel
Pese a las previsiones tomadas para enfrentar el huracán, el Hospital del Niño necesita diésel para poder mantener su funcionamiento requerido como institución hospitalaria pediátrica, y una planta generadora de electricidad que sirva de respaldo a la que utilizan sin descanso.
La Casa de Salud en la que residen 34 niños con incapacidad tanto física como mental, comenzó a racionar el diésel de forma preventiva para prolongar el suministro que tienen hasta que puedan conseguir suficientes abastos. Algunos de los niños están encamados y otros tienen condiciones como perlesía cerebral, cardiacas, autismo y retardo. Además, el Hospital del Niño es el hogar de pacientes con condiciones críticas.
“Es algo que siempre necesitamos. Nosotros nos regimos como un hospital y tenemos que estar con la planta todo el tiempo prendida y sí, estamos tratando de racionarlo (el diésel) según las indicaciones del equipo médico y del ingeniero que nos da servicio en la institución”, expresó la relacionista público, Yadirka Rosa.
En cuanto al generador de electricidad, el hospital necesita que sea portátil de 200 kilos. “Lo que queremos es tener un generador por si surge la emergencia. Estamos previniendo por si acaso hay que cambiar uno por el otro”, sostuvo. Sobre la condición de los niños tras el huracán, dijo que se encuentran bien, al igual que el edificio que los alberga. Los daños ocurrieron en el exterior, tanto en los portones como el letrero y los árboles que cayeron. Por eso, hizo un llamado a los voluntarios para que ayuden reconstruir las áreas, en especial el parque donde los niños juegan. Los interesados en ayudar pueden comunicarse al 787-783-2226 o al 787-525-2866.