Primera Hora

INSTALACIO­NES DESTROZADA­S

- Duro el panorama para las ligas y para el desarrollo del deporte AURORA RIVERA ARGUINZONI aurora.rivera@gfrmedia.com

El desarrollo deportivo de Puerto Rico y la economía que este genera sufrió el impacto multimillo­nario del huracán María, que dañó gran parte de su infraestru­ctura física tanto en las comunidade­s como en los grandes complejos.

Un recorrido por escenarios emblemátic­os como el Albergue Olímpico de Puerto Rico, en Salinas; el Coliseo Héctor Solá Bezares, en Caguas; el Estadio Jesús María Freire, en Ci- dra, y el Estadio Pedro Montañez, en Cayey, sirvió para evidenciar que, aunque tomará tiempo cuantifica­r el costo de los destrozos, será alto.

En el Albergue Olímpico la destrucció­n saltaba a la vista en varias instalacio­nes como la piscina olímpica, pero el área más afectada era el Club de Gimnasia. Allí estaba el miércoles Jesús Barcia, director, junto a su esposa y directora técnica femenina, Yaritza Zamora, intentando limpiar un poco antes de que dieran las 5:00 p.m. pues debían regresar a su hogar en San Juan antes de que iniciara el toque de queda.

“El domingo, tan pronto se aclaró la cosa, vinimos a ver cómo estaba la situación. Tuvimos que subir a pie (desde la entrada principal del Albergue) ¡y cuando llegamos…!”, recordó. “Y la Federación (cuyo centro de entrenamie­nto y acuartelam­iento de los equipos nacionales está en Carolina) está en unas condicione­s también horribles”, indicó.

En los estadios de béisbol el panorama era similar: torres de alumbrado derribadas, verjas y vallas de amortiguam­iento destruidas, techos y vigas de graderías colapsadas, áreas de calentamie­nto y prácticas inexistent­es, y terrenos inundados o con los efectos de la inundación.

En Caguas, el caso que más consternac­ión causó fue la inundación del Coliseo Héctor Solá Bezares, “la casa de Las Criollas”. Allí parte del techo se desprendió, dejando el tabloncill­o y todas las áreas del sótano a merced de la torrencial lluvia de María.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? DESTRUCCIÓ­N POR DOQUIER Según las manecillas del reloj, el Roberto Clemente Walker de Carolina, el Albergue Olímpico y la Héctor Solá Bezares.
DESTRUCCIÓ­N POR DOQUIER Según las manecillas del reloj, el Roberto Clemente Walker de Carolina, el Albergue Olímpico y la Héctor Solá Bezares.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico