EN LA CIMA
El boricua Alberto “El Explosivo” Machado conquistó el título mundial de las 130 libras de la AMB y busca más.
CAROLINA. El nuevo campeón mundial Alberto Machado llegó a Puerto Rico con deseos de compartir con su familia, con pocas ganas de darle la revancha a Jezreel Corrales y con un grano de arena para la reconstrucción de Puerto Rico.
Machado ganó el título de las 130 libras, Asociación Mundial de Boxeo, el sábado con un nocaut en el octavo asalto ante el panameño Corrales en una pelea celebrada en Nueva York y transmitida por HBO.
‘El Explosivo’, de Monte Hatillo (Río Piedras), mejoró a 19-0, ahora con 16 nocauts. Se convirtió en el tercer campeón mundial boricua en el 2017 luego de Miguel Cotto y Jesús Rojas.
Es el quinto campeón de Puerto Rico en la actualidad junto a Cotto, Rojas y las hermanas Amanda y Cindy Serrano.
Cinturón en mano y vistiendo la gorra del ‘Team Rubio’ de béisbol, Machado habló de inmediato, tras su llegada anoche al aeropuerto Luis Muñoz Marín, sobre los sacrificios que tuvo que hacer para ganar el título.
“Me siento bien. Tuve un campamento difícil en Los Ángeles, en donde vi el paso de (huracán) María. Gracias a Dios, el sacrificio valió la pela. Llego aquí como campeón mundial a brindarle esperanza a Puerto Rico. Sí se puede. Vamos a seguir dándole alegrías a Puerto Rico en estos momentos difíciles”, dijo.
Machado estuvo en Los Ángeles entrenando en el afamado gimnasio de Freddie Roach. Hasta allá fue en septiembre, dos días luego del nacimiento de su primer hijo, a quien vio ayer por primera vez desde entonces. También se reencontró ayer en el aeropuerto con toda la familia que cuidó de su esposa e hijo durante su ausencia.
El púgil regresó como campeón junto a su manejador y coentrenador Juan De León. También estuvo el entrenador Jim Pagán, así como Héctor Soto, de Promociones Miguel Cotto, que lleva la carrera de Machado, y el presidente de la Comisión de Boxeo de Puerto Rico, el excampeón mundial Víctor ‘Luvi’ Calleja.
El nuevo campeón terminó el 2017 con el campeonato mundial. Dijo que compartirá con su familia en lo que resta de este año para entonces escuchar el plan a seguir para el 2018.
“Lo demás vendrá con la compañía promotora”, dijo.
Por ahora, no tiene planes con Corrales, quien le pidió la revancha sobre el ring el sábado. Corrales interrumpió la entrevista postpelea de Machado para hacerle la petición. El panameño ganaba cuando Machado lo derribó fulminantemente con una corta zurda a la mandíbula.
Corrales había perdido el título el día antes de la pelea por estar cuatro libras sobre el peso.
“Nosotros tomamos la pelea a pesar de que él no hizo el peso. Tomamos un riesgo. Él tenía una ventaja en el peso y comoquiera le dimos nocaut. Creo que no se merece una revancha”, dijo Machado.
“Para mí, Machado es un aire fresco. Es un nene disciplinado, sacrificado. Está dispuesto a darlo todo por el boxeo a cambio de que Puerto Rico siga teniendo alegrías”, sostuvo De León.