“MI MISIÓN AHORA ES AYUDAR A PUERTO RICO”
La tenista boricua Mónica Puig y la rusa María Sharapova repartieron ayudas ayer en Loíza
El sol estaba insoportable. La fila de mil familias era enorme desde tempranas horas del día.
Los árboles que apenas comienzan a tener hojas aún no daban la sombra suficiente y muchos allí estaban armados con sombrillas para paliar la intensidad del calor.
Pero al final valió la pena.
Después de la larga espera tendrían su recompensa de manos de las tenistas Mónica Puig y María Sharapova, así como de atletas locales como la voleibolista Shirley Ferrer, el luchador Edgardo López y el velerista Enrique ‘Quique’ Figueroa, quienes juntos a docenas de voluntarios repartieron ayer en la Fundación Ricky Martin de Loíza unas 1,000 estufas de gas, 2,000 botellas de gas, 1,000 lámparas solares, 1,000 paquetes de botellas de agua, 1,000 paquetes de compras, 1,000 paquetes de ‘snacks’ y hasta 1,000 helados para refrescarse al final de la agónica estancia.
De hecho, los asistentes se llevaron tantas cosas que realmente no tenían cómo cargar todas las donaciones recibidas, teniendo que ser ayudados por algunos de los atletas y voluntarios presentes hasta sus autos.
“Yo no sabía que iban a dar tantas cosas”, dijo Idalis Torres, maestra de español, y quien se apuntó en una lista desde las 7:00 a.m.
“Yo me apunté temprano en las lista que tenían las líderes comunitarias que organizaron esto. Luego fui a casa porque vivo bien cerca y entonces regresé. Pero hubo mucha gente con niños allí haciendo fila desde
temprano y con un sol fuerte”.
La actividad fue una iniciativa de la medallista de oro olímpica, quien recaudó $150,000 y los invirtió en la compra de las estufas, del gas y de las lámparas en los Estados Unidos y luego en el transporte marítimo hacia la Isla. Además contó en el respaldo de la Cruz Roja y otras entidades en la repartición de ayudas.
“Ha sido emocionante estar con la gente de Puerto Rico y dar un poco de esperanza. Sé que Puerto Rico va a mejorar. Estamos en esta misión para tratar de ayudar a Puerto Rico
a levantarse de nuevo”, dijo Puig a los medios de prensa.
(Inicialmente sentí) “Mucha impotencia. No podía hacer nada. Estaba tan lejos. Pero estaba pendiente a cómo estaba mi familia. Mi misión ahora es ayudar a Puerto Rico”, indicó.
Sharapova dijo sentirse honrada de acompañar a Mónica en esta gestión en la Isla, a 10 meses de su partido amistoso aquí en diciembre.
“Es muy bueno lo que está haciendo Mónica por su país. Esta vez no venimos a un partido de tenis sino a ayudar a la gente
afectada por esto. El 80 por ciento del País está sin luz y más de un tercio aun está sin agua. La devastación ha sido fuerte”, expresó Sharapova.
Astrid Marchán, madre de Mónica, dijo que la intención de su hija era poder proveer artículos que ahora mismo en la Isla son de gran utilidad pero muy difíciles de conseguir.
“Ella quería traer cosas útiles para gente, como las estufas y el gas. Ella misma las quiso comprar y las quería dar personalmente así que fuimos al suplidor (en los Estados Unidos) y nos dieron buen precio por la causa. Luego lo embarcamos y llegó a tiempo”, explicó Marchán acerca de la gestión de su hija, quien estuvo recientemente compitiendo en el Abierto de Luxemburgo y obtuvo un segundo lugar.
“Ella no quería delegar esto. Quería llevarlo ella misma. Como madre estoy muy orgullosa de ella y de lo que siente por el pueblo de Puerto Rico. Ella quiere seguir haciendo esto, pero ahora hay que ‘engordar la vaquita’ otra vez”, afirmó.