SIGUEN LOS PROBLEMAS DE INVENTARIO
MIDA asegura que la industria de alimentos no ha podido atender a clientes
La Cámara de Mercadeo Industria y Distribución de Alimentos (MIDA) de Puerto Rico estableció que, a pesar de los múltiples esfuerzos en los dos últimos meses, la industria alimenticia sigue registrando problemas para recibir mercancía que les permita restablecer sus inventarios a niveles previo a los huracanes Irma y María.
Ricky Castro, presidente de MIDA, que representa cientos de integrantes a través de toda la cadena de distribución de alimentos, explicó ayer por escrito que inmediatamente después del paso de María, los supermercados comenzaron a abrir con generadores eléctricos y despachando la mercancía que les quedaba.
Sin embargo, tres semanas después del paso del temporal las dificultades para volver a abastecer estos comercios provocaron la creación de un comité de trabajo en el Centro de Emergencia del Centro de Convenciones en San Juan para identificar los problemas y
Ante esta situación, los navieros se vieron en la obligación de establecer prioridades de lo que se podía o no montar”
RICKY CASTRO
PRESIDENTE MIDA
proveer soluciones.
“De esas reuniones se documentó con claridad que uno de los mayores problemas era la falta de espacio en los barcos debido al incremento de mercancía que estaba tratan- do de llegar. Ante esta situación, los navieros se vieron en la obligación de establecer prioridades de lo que se podía o no montar, lo que de por sí es una confirmación de que no existía el espacio necesario para suplir la nueva demanda”, planteó Castro.
Aun así, en las reuniones iniciales de ese comité se le pidió a MIDA que lo documentara y en solo 15 empresas se conoció que unos 1,400 furgones estaban atrasados en los Estados Unidos, cifra que aumentó a 1,700 la semana siguiente, agregó el líder de MIDA.
“Estos números no pretendían medir la magnitud del problema en toda la industria, que debía ser mucho mayor, ni consideraban otras industrias que han estado tratando de traer mercancía sin éxito. Simplemente sirvió para documentar, que a pesar de que los navieros inicialmente negaban la existencia del problema, el mismo era real”, concluyó Castro.