CLÁSICO MUNDIAL DE BÉISBOL SUBCAMPEONES DEL MUNDO E ÍDOLOS DE PUERTO RICO
De todos los eventos del 2017, el Clásico Mundial de Béisbol fue ‘El Evento’ del año para Puerto Rico. Con una plantilla repleta de talento joven ya establecido en las Mayores jugando al lado de un nutrido grupo de veteranos, la novena boricua alcanzó el subcampeonato por segunda edición corrida de este torneo. Con figuras de la talla de Carlos Correa, Francisco Lindor, Javier Báez, Carlos Beltrán y Yadier Molina, la novena jugó un béisbol dinámico que se ganó a todos sus rivales camino a llegar invicto al juego de campeonato. A la vez, sus triunfos generaron una euforia increíble en la Isla. La fiebre fue conocida como la influencia del Team Rubio y provocó que miles de puertorriqueños se pintaran el cabello de rubio siguiendo la moda que impuso en el equipo el receptor Yadier Molina como acción para crear unidad entre todos los jugadores. Sobre el terreno, Puerto Rico fue el gran equipo del campeonato, ganando partidos convincentemente y haciéndolo con un juego bonito y divertido, acción que le ganó titulares en los Estados Unidos por devolverle alegría al juego que los norteamericanos han enclaustrado en una seriedad un tanto aburrida. Por mala suerte, sin embargo, fue el propio equipo de los Estados Unidos el que derrotó a Puerto Rico en la final, jugando en Los Ángeles para alzarse ellos con su primer campeonato del Clásico Mundial. El lanzador de origen puertorriqueño Marcus Stroman, quien estuvo en los planes de Puerto Rico pero al fin de cuenta optó por lanzar por la novena de la tierra en donde nació, acribilló a los bateradores boricuas en el juego final camino a guiar a los norteamericanos a una victoria 7-1. Fue un gran desquite para él, pues los boricuas le habían apabullado previamente durante la serie, pero aún así, nada estropeó el gran momento del deporte boricua en el año.