RECUERDA

● Hidrata tu piel. Antes de aplicar cualquier producto de maquillaje sobre nuestro rostro la piel debe estar profundamente hidratada, ya sea con un tónico o con una crema hidratante. Si aplicamos el maquillaje sobre la piel seca, este lucirá fatal, ya que la dermis no absorberá con eficacia todo el producto, sino solo una parte, por lo que horas más tarde tu maquillaje comenzará a cuartearse. Eso sí, no olvides que la crema hidratante debe ser específica para tu tipo de piel y no una cualquiera.

● Aplica capas extra en algunas zonas. Determinadas zonas de la piel suelen experimentar con mayor facilidad brillos e imperfecciones, por lo que en ellas será necesario aplicar alguna capa extra de producto. Estas zonas son especialmente la nariz y la barbilla, por lo que te recomendamos que apliques más maquillaje en estas zonas para que tu maquillaje no se eche a perder con el paso de las horas.

● Retira el exceso de grasa. A veces nos pasamos con el producto o bien nuestra piel produce mucha grasa, por lo que es conveniente utilizar bases semimates para evitar el exceso de producto, así como también emplear papelitos secantes para retirar y eliminar grasa de la piel, la cual podría producir los antiestéticos brillos que después aparecen en todas nuestras fotos de fiesta.

● Fija tu maquillaje. El último ‘tip’ que te damos se podría decir que es el imprescindible, y es que el uso de productos específicos para mantener nuestro maquillaje en buen estado es más que recomendable. Se trata de los fijadores, productos similares a la laca que se aplican en el rostro para mantener bajo control todos los tonos y texturas de tu maquillaje durante toda la noche.