HUMILLANTE
Uno de los episodios más amargos que la reina de belleza ha tenido que enfrentar fue ser despojada de su corona de Miss Florida USA en 2016. Aunque logró una compensación económica como resultado de la demanda que sometió, todavía resiente aquella experiencia.
“Fue un proceso bien humillante para mí porque, primero, yo había trabajado tanto por algo y a la hora de poder expresarme, no pude porque había una litigación de por medio. Y segundo, no siento que fueron justos conmigo del trato que se me dio sobre cómo surgió la situación de ser destronada. Estuve un poco triste y deprimida por todo lo que estaba pasando. Había muchas cosas que no estaban dentro de mi control. Pero gracias a Dios tengo amistades y mi familia que siempre estuvieron ahí apoyándome. Sin ellos no hubiese podido pasar esa etapa tan difícil. Pero algo me enseñó ese proceso, y es que yo soy una mujer fuerte y determinada”.
Tras la dura experiencia, competir nuevamente y resultar vencedora como Miss Florida 2017 representó un doble triunfo. “La palabra que describe eso es reivindicación”, analiza Dávila, quien ahora contempla dedicar más tiempo a la ayuda humanitaria ya que “me sensibiliza un poco y me hace tocar un poco más la tierra saber que soy bien afortunada de tener las cosas que tengo”.