MÓNICA DISFRUTA SU TRIPLETA
La boricua se coronó como la reina del tenis de los Juegos Centroamericanos al ganar su tercera medalla de oro consecutiva
BARRANQUILLA. Con una gran sonrisa y levantando tres dedos en representación de la cantidad de medallas centroamericanas que ha ganado, la tenista boricua Mónica Puig recibió ayer su tercera presea de oro.
Fue un momento sublime para la boricua, que derrotó en la final a la colombiana Mariana Duque-Mariño por marcador de 6-1 y 6-1, y para los fanáticos boricuas que inundaron la cancha central del Parque de Raquetas La Castellana y se hicieron sentir desde el principio con cánticos para alentar a la primera medallista de oro olímpico de Puerto Rico.
Pero la alegría de Puig comenzó justo cuando se alzó con la victoria, y sonrió para las gradas. No fue un momento tan dramático como el que vivió en las Olimpiadas de Río 2016, ayer no tuvo mayores dificultades para salir airosa, pero se sentía feliz y así lo dejó saber.
“Puerto Rico, esto es pa’ ti”, fue lo primero que dijo con mucha euforia al hablar con los medios puertorriqueños luego de su victoria.
“Gracias por nunca perder la fe. Gracias por creer en mí, por apoyarme. Ya estamos de pie”, declaró la atleta, quien agregó que el récord que había logrado “es para ustedes”.
Resultó curioso que el juego por la medalla de oro, en el que una de las protagonistas era colombiana, se realizara a un lunes a las 9:00 a.m. (10:00 p.m. hora de Puerto Rico). Ese horario parece haber sido determinante explicar la poca asistencia de fanáticos colombianos en comparación con los puertorriqueños.
Con el graderío lleno de puertorriqueños, la rumba no tardaba en montarse cada vez que había una pausa.
Ese apoyo fue importante para la atleta, que indicó que se sintió como cuando ganó su primer oro en los Centroamericanos de Mayagüez 2010.
“Cuando sentí los pleneros, me dije: ‘Estamos jugando en Puerto Rico. Estamos en Mayagüez de nuevo’”, dijo la triple medallista centroamericana, quien lamentó que Mariño-Duque no haya contado con tanto apoyo dentro del público.
Al hablar del partido, Puig reconoció que le sorprendió la facilidad con la que ganó, pues creía que se iba a ir a tres sets, porque siempre que se ha enfrentado a Duque-Mariño han tenido juegos apretados.
“Me sentía muy bien, enfocada en el partido. Muy disciplinada. Desde el principio empecé con mi plan y nunca lo abandoné. Saqué muy bien. Devolví muy bien. Jugué los puntos muy bien. Simplemente, no creo que cometí muchos errores”, expuso.
Puig compartió que el resultado del partido le había enseñado que, si seguía aplicándose, podría lograr cosas grandes en su carrera.
Durante el primer set, Puig se llevó los últimos cinco juegos, dominando el tercero y el quinto cuando la colombiana se fue en cero.
En el segundo set, la historia se repitió, con Puig dominando los últimos cuatro juegos.
Duque-Mariño cometió ocho dobles faltas, mientras Puig hizo dos. Asimismo, la puertorriqueña le rompió cinco servicios a su contrincante.
La mexicana Giuliana Olmos se llevó la medalla de bronce al vencer a la trinitense Breana Stampfli por 6-1 y 6-3. Posteriormente, Puig ganó también una presea de bronce en dobles femenino junto a Mónica Matías tras vencer a las bahamenses Simone Pratt y Danielle Thompson por marcador de 6-2 y 6-0.
Puig llegó a la final de sencillos luego de derrotar a la cubana Yamile Fors en un partido de segunda ronda 6-0 y 6-2. En cuartos de final venció a la mexicana Fernanda Contreras 6-4 y 6-4. En la semifinal se impuso a Stampfli por 6-1 y 6-2.
La también medallista de bronce en los Juegos Panamericanos ganó oro en los Juegos de Mayagüez 2010 y en Veracruz 2014. Es su tercera presea dorada consecutiva.
Antes de ella, la boricua Kristina Brandi obtuvo oro en las dos ediciones anteriores a Mayagüez: San Salvador 2002 y Cartagena 2006.