¡Todo vendido en dos días!
Miles de fanáticos hicieron largas filas para comprar sus boletos y ver a Lin-Manuel Miranda en Hamilton
Nuestro motivo fue uno: proteger en todo momento al público en Puerto Rico. Que tuvieran la oportunidad de ver este musical en la Isla”
ENDER VEGA / PRODUCTOR
No hubo break para los gansos que querían boletos para alguna de las funciones que Lin-Manuel Miranda ofrecerá en el teatro de la Universidad de Puerto Rico (UPR) del musical Hamilton.
Quienes se dedican a comprar grandes cantidades de entradas para luego venderlas a sobreprecio no tuvieron acceso a las mismas a través de Internet, y a aquellos que les encanta colarse en las filas no pudieron hacerlo.
Este fue el panorama que se vivió el pasado sábado y domingo durante la venta de boletos del laureado musical escrito por Miranda, una estrategia que tomó meses de planificación, según explicó Ender Vega, de Bas Entertainment.
“No fue una decisión a la ligera ni a última hora. Nuestro motivo fue uno: proteger en todo momento al público en Puerto Rico. Que tuvieran la oportunidad de ver este musical en la Isla. Conozco el mercado local. Si llegamos a salir con todo el inventario por Internet, mucha gente se hubiese quedado sin ver el show”, aseguró el productor respondiendo a las críticas de lo limitado de las compras a través de la página de Ticketpop.
Los pocos boletos que estuvieron disponibles se agotaron en minutos, así que cientos de fanáticos se movilizaron al recinto riopedrense o a alguno de los puestos de ventas para asegurar sus boletos.
No importó el calor, las largas filas y mucho menos las horas que transcurrieron para comprar un máximo de cuatro entradas. Algunos pernoctaron en la fila para asegurar estar entre los primeros cuando la boletería abriera a las 9:00 de la mañana del sábado. El motivo fue más que suficiente: ver a Lin-Manuel protagonizar el musical , lo que no hacía desde el 9 de julio del 2016 cuando subió por última vez al teatro Richard Rodgers, en Broadway, para interpretar a Alexander Hamilton, padre fundador de Estados Unidos.
Tampoco importó quién se proponía comprar los boletos; tenía que hacer la fila como cualquier hijo de vecino, lo que le tomó un promedio de ocho horas.
La estrategia del productor valió la pena. “Lo logramos. ¡Todo vendido!”, acotó.
Por cierto, tanto Vega como el papá de Lin-Manuel, don Luis Miranda, recorrieron el sábado algunos de los puntos de venta, entre ellos el teatro de la UPR. “Para nosotros, siempre traer a
Hamilton a Puerto Rico era algo que Lin-Manuel indicó que quería hacer mucho antes del huracán María. Después del huracán las metas cambiaron; no era solamente traer una producción artística de la calidad de Hamilton sino dejar a la Isla un poco mejor de lo que la encontramos”, dijo Miranda.
Por su parte, Lin-Manuel estuvo “presente” en dos momentos, gracias a la magia de Facetime. “Los fanáticos lo saludaron, le tiraron besos… Está feliz con todo lo que ha pasado. Loco que llegue el día que tanto esperaba; loco que sea el 27 de diciembre para empezar con los ensayos de la pieza”, añadió Vega.
Pero no todo está perdido para quienes no lograron comprar el boleto. Aún quedan 10 mil disponibles a $10. De ellos, 9 mil se obtendrán mediante una lote- ría; los mil restantes serán para estudiantes universitarios, quienes deberán mostrar su tarjeta de identificación y programa de clases activo, y comprar el boleto el mismo día de la función programada para el 9 de enero.
Mientras, otra cantidad no determinada puede adquirirse si se hace un donativo de $5,000 a beneficio del Fondo Flamboyán para las Artes, creado por la familia Miranda junto con la Fundación Flamboyán.
A estas se suman 1,600 taquillas asignadas por la producción del musical a algunas empresas endosadas por la Compañía de Turismo, y las cuales serán vendidas en paquetes para turistas que reserven una estadía de 4 días y 3 noches en la Isla y se aventuren a disfrutar de un itinerario de experiencias locales.