ALCALDES DE ZONA OESTE SE PREPARAN PARA SEQUÍA
Autoridades dan la voz de alerta a los municipios de Moca, Aguadilla, Aguada, Camuy, Isabela, Quebradillas y Rincón por los bajos niveles de la represa Guajataca
El plan de racionamiento de agua que iniciará el Gobierno en el noroeste de la Isla es un temeroso cuco que auguraban algunos alcaldes de los siete municipios que se perjudicarán y que se suplen, principalmente, del deteriorado embalse de Guajataca.
El anuncio del gobernador Ricardo Rosselló -sobre el plan de contingencia que está supuesto a comenzar el 20 de febrero- no fue sorpresivo para ejecutivos municipales de pueblos como Isabela (Carlos Delgado) y Quebradillas (Heriberto Vélez), quienes responsabilizan sobre lo ocurrido al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (USACE) y al gobierno estatal, alegando que los trabajos de reconstrucción en la zona (post huracán María) se han hecho extrayendo agua del embalse sin prever que los niveles estaban descendiendo aceleradamente ante la cercanía de una época de poca lluvia.
El resto de los pueblos perjudicados son Aguadilla, Aguada, Camuy, Moca y Rincón.
“Fui testigo de cómo durante el verano de 2018, USACE hizo descargas desde el embalse al río Guajataca y, en ese momento, hicimos los reclamos sabiendo que el nivel del lago bajaría de forma drástica y que nos afectaría, precisamente, en una época como esta que es de poca precipitación… ellos sabían que esto iba a ocurrir y se lo advertimos en unas cartas entregadas a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), a la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) y a USACE. Ahora es fácil resolverlo con un racionamiento que, por ejemplo, en Isabela afectará a más de 48,000 personas”, dijo Altieri sobre el pueblo costero que a diferencia de los demás municipios perjudicados no cuenta con otras fuentes de abasto.
Mientras, el alcalde de Quebradillas, indicó que, a su juicio, la situación pudo anticiparse, pues había advertido que USACE extraía demasiada agua del embalse.
“Yo le había dicho a los de FEMA
que estaban sacando demasiada agua y que nos iba a afectar a la larga. Pusieron siete tubos tirando al sistema de riego para bajar los niveles y que no colapsara la represa. Nunca se reunieron con nosotros. Eso los advertimos. Nos va a afectar a gran parte del pueblo”, dijo Vélez Vélez.
Contó que el año pasado adquirió un camión cisterna de 6,500 galones “y otro más pequeño, y compré el equipo para
cargarlo” en preparación de una eventualidad como esta.
De los 26,000 habitantes de Quebradillas, anticipa que unas 9,000 familias se vean afectadas
De otra parte, el alcalde de Camuy, Edwin García Feliciano, aseveró que anticipaba que un racionamiento pudiera perjudicar a sus constituyentes, pues viaja constantemente a San Sebastián y pudo constatar que los niveles del embalse están más bajos.
García Feliciano indicó que planteará en una reunión de alcaldes programada para el jueves cuán viable es la posibilidad de que la planta de filtración del barrio Piedra Gorda de Hatillo y la del barrio Quebrada en el municipio camuyano puedan aliviar la situación que atravesarán cerca de 4,000 personas.
También sugerirá que el corte del suministro de agua sea de 8 horas, comenzando a las 8:30 a.m. y no a las 5:00 a.m., para que “las familias tengan tiempo de preparar a los niños para ir a la escuela y los adultos al trabajo”.
El alcalde de Moca, José “Kiko” Avilés, tomó la situación más alivianado y dijo estar enfocado en no alarmar a la gente.
“No podemos alarmarnos ni alarmar de manera exagerada a la ciudadanía… no es la primera vez que sufrimos una emergencia como esta, sobretodo, considerando que la experiencia más difícil la vivimos con el huracán María en el 2017”, expresó Avilés.
Agregó que hay que crear conciencia sobre el daño severo que sufrió el embalse de Guajataca con el azote del ciclón y que desde entonces el gobierno federal y estatal están trabajando para resolver el problema.
“Pero esto es una situación costosa y toma mucho tiempo. Esta temporada no ha caído lluvia suficiente y hay que tomar medidas de precaución. Ahora nos toca a nosotros hacer la parte que nos corresponde”, indicó Avilés, quien hizo un llamamiento a la prudencia ciudadana a través de las páginas cibernéticas del gobierno municipal de Moca.
Agregó que en el caso de Moca hay muchas comunidades que reciben agua directa de hincado de pozos, por lo que no se verán afectados.
Aún así está pendiente a solicitar unos camiones cisternas al gobierno con el fin de ubicarlos en unas zonas particulares, como el barrio Cerro Gordo donde la gente pueda ir a suplirse de agua.
Rosselló insistió que el plan de racionamiento es una medida cautelar para evitar que la situa-
Yo le había dicho a los de FEMA que estaban sacando demasiada agua y que nos iba a afectar a la larga...
Eso los advertimos”
HERIBERTO VÉLEZ VÉLEZ / ALCALDE DE QUEBRADILLAS
ción del embalse se agrave.
Tras el paso del huracán María, USACE trabaja para remediar los daños que sufrió el embalse Guajataca.
Ante el pronóstico de poca lluvia -y pese a los ajustes y la reducción de extracciones significativas que ha hecho la AAA para evitar que el servicio de los abonados se perjudique - los niveles que hoy refleja el embalse requieren que se hagan ajustes operacionales, advirtió el presidente ejecutivo de la corporación pública, Elí Díaz Atienza.
Añadió que, por el momento, no se contempla el congelamiento de precios.
Los trabajos en Guajataca por parte de USACE deben culminar para mayo, se especificó.