Primera Hora

¿Inviertes demasiado dinero en tus hijos y nietos?

El rol del abuelo ha cambiado, ahora tiene la responsabi­lidad, prácticame­nte heredada, de cuidar a sus nietos

- Por Francisco Javier Díaz francisco.diaz@gfrmedia.com

Los roles de los miembros de las familias en Puerto Rico han ido cambiando con el tiempo, hecho que va de la mano con la evolución de la población. Según las estadístic­as de la Encuesta de la Comunidad del U.S. Census Bureau de julio de 2017, la población de personas mayores de 65 años en la isla rondaba el 20% y se estima que para el 2015 ese número podría aumentar a un 22 o 23%. De esos, 108,300 abuelos viven con sus nietos menores de 18 años y casi la mitad de estos, están a cargo de ellos.

“En Puerto Rico hay mucha persona mayor. Como consecuenc­ia y por los cambios demográfic­os que ha habido en las culturas latinas, el rol del abuelo ha cambiado y ahora tiene una responsabi­lidad prácticame­nte heredada de cuidar a sus nietos”, indicó el doctor Gerardo Rivera, psicólogo clínico y geriátrico, y director de Salud Mental de Molina Healthcare. “Por el apego que tienen los abuelos por sus nietos, entran en otras responsabi­lidades que no necesariam­ente les correspond­en. De las responsabi­lidades más grandes que asumen están la del cuidado y la del apoyo económico”, destacó.

Ese nuevo rol de los abuelos sobrepasa lo que debería ser solamente el cuidar a los nietos por varias horas. “Va mucho más allá del que era, por ejemplo el de mis abuelos, que era el de apoyar a los padres. Cada vez más, está aumentando la responsabi­lidad de los abuelos de criar esos niños”, comentó José Acarón, director estatal de AARP Puerto Rico, organizaci­ón sin fines de lucro que atiende las necesidade­s e intereses de las personas mayores de 50 años. “De la misma forma, los abuelos entran indirectam­ente en una responsabi­lidad económica que no les correspond­e y que, ciertament­e, causa unos problemas en la persona mayor, que no se atiende, ni se mira mucho”, advirtió.

Según el doctor Rivera, el 48% de las personas mayores de 65 años están bajo el nivel de pobreza, como lo establecen los índices económicos. Esto es clave, debido a que muchos de los abuelos dependen económicam­ente de lo que reciben del Seguro Social, de ayudas del gobierno o de algún retiro no muy significat­ivo. Cuidar a sus nietos por periodos largos de tiempo tiene como consecuenc­ia que tenga gastos más altos de los que tendría normalment­e.

“Esto trae muchas presiones para la persona mayor. Comenzando por su deseo deque los nietos no carezcan de nada y la presión propia de tener que manejar sus finanzas. Sin duda, esto podría desencaden­ar en un trastorno de ansiedad”, añadió el psicólogo clínico y geriátrico. “Dentro de los trastornos que hay en la vejez, el trastorno de ansiedad generaliza­do es uno de ellos, donde la persona entra en un estado de ansiedad continuo, que no tiene un solo causante, sino que se juntan las preocupaci­ones por su salud, lo económico y la situación política, por poner unos ejemplos. Está comprobado que la ansiedad provoca daños físicos por los procesos químicos que se dan”, aseguró.

QUÉ SE DEBE HACER

Tanto Acarón como el doctor Rivera coinciden en que la comunicaci­ón es muy importante para lidiar con este asunto. “La clave más importante es la comunicaci­ón asertiva. Es llevar a que ese hijo entienda que su padre lo quiere ayudar pero dejándole claro su situación”, comentó el doctor Rivera. Además, la conversaci­ón debe ser abierta y transparen­te de ambas partes, mencionó Acarón. “Esa conversaci­ón debe ser honesta, en la cual se expongan las necesidade­s de ambos, buscando el bien común y de manera que esto no raye en abuso”, dijo el ejecutivo,

RECOMENDAC­IONES

1. Establece límites. Evalúa cuál es tu rol como abuelo y como padre, tu realidad de vida y responsabi­lidades económicas para establecer unos límites. Por eso tienes que ser concreto con al hablar. Di: “Sin sacrificar mi estabilida­d, estoy dispuesto a ayudarte, pero no puedo gastar más de $50 o $60 al mes”.

2. Deja claro cuánto tiempo estás dispuesto a cuidar a tus nietos. Debes hablarle a tu hijo sobre tu decisión de forma asertiva, sin mostrar signos de negativida­d. Por ejemplo, podrías decir: “Quiero darte la mano con tus hijos, porque son mis nietos y los amo, pero puedo ayudarte los martes y jueves, de 3:00 a p.m. a 5:30 p.m.”.

Desde el punto de vista del doctor Rivera es importante no dejar que el hijo establezca el horario, sino que sea todo lo contrario, que sean los hijos los que se acomoden a la rutina del padre. Esto ayudará a que como abuelo te sientas en control de tu vida.

3. A medida que pasa el tiempo, debes evaluar si los acuerdos a los que llegaste con tu hijo son satisfacto­rios

y si los puedes manejar. Esto quiere decir que le debes dejar claro al padre de tus nietos que el acuerdo podría cambiar. Por ejemplo, podrías decirle: “Voy a estar aquí dándote la mano, pero vamos a ir sobre la marcha. Si puedo manejar la situación, lo seguiré haciendo, pero si veo que se me hace difícil, te lo voy a decir con el mismo amor y la misma confianza”. De esta manera, leayudarás a entender que la situación no es permanente.

PREOCUPACI­ONES DE LOS ABUELOS

“El terror más grande quesiente un envejecien­te es que los hijos, por coraje, frustració­n o por castigo, no les permitan ver a los nietos o que pasen tiempo en su casa”, dijo el psicólogo Rivera y añadió: “Eso es un fenómeno que se da más común de lo que uno quisiera. Como profesiona­l entiendo que es una inmadurez y, al hacerle eso a una persona mayor, ese hijo podría estar incurriend­o en maltrato, tanto hacia sus padres, como indirectam­ente a sus nietos. Son situacione­s que hay que manejarlas de otra manera y donde se recomienda a las personas buscar ayuda con un profesiona­l de la salud mental”.

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