Y TAPÓN POR ALLÁ
Esperaron hasta cuatro horas en el nuevo “servicarro” del Departamento del Trabajo
Las personas que llegaron ayer desde temprano al servicarro establecido en el Centro de Convenciones de Puerto Rico, ubicado en Miramar, para entregar documentos pendientes en el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos (DTRH) tuvieron que hacer kilométricas filas que en algunas instancias sobrepasó las cuatro horas.
Por más ajustes que han hecho en la agencia para agilizar el proceso de entrega de documentos, ayer fue evidente que el gran problema es la falta de empleados, pues en la jornada vespertina apenas ocho recursos se encargaban de la dinámica de recogido de papeleos y orientación a la gente que busca beneficiarse del seguro del desempleo, muchos tras quedar sin ingresos por cesantías temporales o despidos permanentes a causa de la crisis provocada por la pandemia de la COVID-19.
Entre los que llegó a las 7:30 de la mañana con la idea de entregar unos documentos que validen que fue despedido de su empleo como contratista por servicios de “handyman” en el Hospital Auxilio Mutuo, en San Juan, se encontró Humberto Irizarry, quien tuvo que ser paciente cuando vio la monumental congestión de vehículos en la zona.
“Ahora es que me vienen a atender aquí… y ahora mismo son las 11:57 de la mañana”, expresó quien hizo la cola de la fila de autos desde el residencial Puerta de Tierra,
aledaño a los muelles de San Juan.
“Espero que puedan evaluar el expediente con la información correcta que traje y que puedan determinar que soy elegible para el desempleo”, dijo tratando de ser optimista.
El capitán Josué Walker, quien dirigía el flujo de autos que llegaba al Centro de Convenciones, calculó en “miles” la cantidad de autos que desde la madrugada comenzaron a hacer la fila del “servicarro” que “en un momento dado llegó hasta más allá del muelle 10 en San Juan”.
“Siempre se atiende hasta el último vehículo, aunque tengamos que extender el horario de servicio”
JAVIER VILLA PORTAVOZ DE PRENSA DEL DTRH
Dijo que a pesar de lo pesado del tránsito se pudo contener la situación pues los empleados del Departamento del Trabajo estaban tratando de agilizar las gestiones. “Sale un auto y entra otro… al momento nada de percances”, reiteró Walker.
Aunque el horario establecido para dar servicios a los ciudadanos fue de 7:30 de la mañana a 5:00 de la tarde, el portavoz de prensa del DTRH, Javier Villa, explicó que había intención de atender hasta el último auto que llegue a la zona prevista de entrega.