LOS DODGERS NO QUIEREN UN SÉPTIMO JUEGO
Dave Roberts confía en que, tras el día de descanso, su equipo cerrará la Serie Mundial
En el sexto partido de la Serie Mundial del 2020, que se jugará el martes, los Dodgers de Los Ángeles esperan que a la tercera sea la vencida.
Desde el 2010, la Dodgers han ganado el Oeste de la Liga Nacional ocho veces consecutivas, y en 2017 y 2018 fueron a la Serie Mundial, perdiendo primero ante los Astros de Houston y un año más tarde ante los Red Sox de Boston. Las dos veces vieron al ganador de la Serie Mundial celebrar en su parque.
Para el sexto partido de la Serie Mundial del martes, y necesitando un triunfo más para ganar su primera corona en 32 años, el dirigente de los Dodgers, Dave Roberts, designó a Tony Gonsolin como abridor para un juego que podría darle a Los Ángeles su mayor victoria en más de tres décadas.
“No creo que ninguno de nosotros esté pensando en un séptimo juego”, dijo Roberts tras el choque del domingo. “Vamos a disfrutar el día libre (lunes), darle descanso a los muchachos y a enfocarnos en el sexto juego. Gonsolin va a lanzar y esperamos ganar. Eso es lo único en que estamos pensando”.
De hecho, tras el encuentro dominical, Roberts comentó que no había considerado traer a Walker Buehler para el sexto choque. De haberlo utilizado, Buehler hubiera trabajando sin los días de descanso habituales. Insistió en Gonsolin, quien durante la campaña regular tuvo 2-2 con 2.31 de efectividad con 46 ponchetes en 46.2 entradas como una sólida parte del cuerpo de lanzadores de los Dodgers.
“Él es un lanzador abridor, si puede darnos cinco o seis entradas sería grandioso”, dijo Roberts, agregando que el día libre ayer les dio una oportunidad de descanso a su bullpen, el que usaría en caso de que Gonsolin necesite ser rescatado.
El derecho Gonsolin abrió el segundo desafío de la Serie Mundial y cargó con la derrota pese a que lanzó solo 1.1 entradas. Ponchó a uno y dio un boleto, y permitió el primero de dos cuadrangulares de Brandon Lowe en el juego. Fue la única carrera que cedió, Pero Roberts salió ese día con la idea de un ‘bullpen day’, en la que utilizó siete lanzadores.
Esta vez, según sus palabras, la estrategia sería distinta o el anuncio es solo un anzuelo para ver si los Rays, especialistas en el uso de elevistas como inciadores, se lo tragan.
Blake Snell abrirá por los Rays
En el otro lado estará el zurdo Blake Snell, ganador del Cy Young que en su pasada salida tiró 4.2 entradas y ponchó a nueve al permitir dos carreras. Dejo a la blindada alineación de los Dodgers sin hits durante cuatro episodios, pero eso fue el pasado miércoles, por lo que llega al partido con sus cinco días de descanso.
El dirigente de los campeones de la Liga Americana, Kevin Cash, manifestó que la fórmula ganadora de los Rays no cambiará mucho para el sexto juego, excepto que tendrá más agresividad en la mezcla.
“Ha sido retante para nosotros tomar la delantera temprano en el juego. Pero vamos a ser más agresivos”, expresó Cash ayer. “Si de alguna manera podemos tomar la delantera y podemos limitarlos, tenemos listos algunos de los brazos grandes del bullpen. Pero ese ha sido nuestro modo de operar todo el año. Eso es posiblemente lo que nos hace especiales”.
El cuadrangular sigue siendo el batazo rey
ARLINGTON, TEXAS (AP). A tono con el tema sobre el orgullo de adelantar los corredores en cada turno al bate, y la fabricación de carreras, los equipos en esta postemporada han tomado en serio el asunto de los batazos largos.
Los batazos de cuadrangular han impulsado 237 de las 462 carreras en lo que va de estos playoffs hasta el quinto juego de la Serie Mundial, según Elias Sports Bureau.
Eso equivale al 51.3%, frente al 46.6% del año pasado y el más alto desde que la postemporada se expandió más allá de la Serie Mundial en 1969.
Tampa Bay ha dependido más del batazo largo que la mayoría de los equipos. Los campeones de la Liga Americana se convirtieron en el primer equipo en conectar jonrones en cuatro entradas consecutivas de un juego de postemporada durante una emocionante remontada por 8-7 sobre los Dodgers de Los Ángeles el sábado por la noche que empató la Serie Mundial a dos triunfos por bando. El jonrón de tres carreras de Brandon Lowe ante Pedro Báez le dio a los Rays una ventaja de 5-4 en el sexto, y Kevin Kiermaier lo empató 6-6 con un jonrón contra Báez en el séptimo.
Los Rays no conectaron el domingo por la noche y perdieron 4-2 en el quinto juego. Tienen 33 jonrones en la postemporada, que representan 52 de sus 78 carreras (66.7%).
“Creo que es más parte de la tendencia, cuando ganamos, ni siquiera podría decirte cómo anotamos las carreras: a través de jonrones, boletos, hits, errores o lo que sea”, dijo el dirigente de los Rays Kevin Cash.
“Creo que es más difícil hacer algo ofensivamente en este juego porque el pitcheo es muy talentoso, esos brazos eléctricos que tienen estos equipos y definitivamente en la postemporada”.
“La razón por la que están en postemporada, jugando béisbol de postemporada, es porque mucho de eso coincide con un gran pitcheo y eso es lo que estamos viendo. Así que eso es lo que hace que sea más difícil anotar”.
Los Ángeles ha sido mucho menos dependiente del cuadrangular, conectando 27 jonrones que impulsaron 42 de 98 carreras (42.9%). Max Muncy y Joc Pederson conectaron el domingo por la noche.
Pero eso es diferente a la temporada regular, cuando los Dodgers estaban segundos en las Mayores con 51.3% y Tampa Bay estaba en el puesto 20 con un 41.5%. Cincinnati fue el que más dependió de jonrones con un 59.7%, según Elias.
“No estamos tratando de pegar un jonrón. Eso no es de lo que estamos hablando en nuestro plan de juego. Simplemente vamos a mantener la disciplina en nuestro enfoque”, dijo Muncy.
“Son resultado de que hacemos cosas buenas. No estamos simplemente buscando la cerca cada vez que vamos al plato. Son los muchachos armando buenos turnos al bate, viendo buenos lanzamientos y aprovechando un error que cometa el lanzador”.