IRÁ A JUICIO CASO ROSIMAR
Jueza halla causa contra Jay O‘neill González por secuestro y asesinato
Jay O ‘Neill González Mercado enfrentará juicio por el secuestro y posterior asesinato de Rosimar Rodríguez Gómez. Así lo determinó en la tarde de ayer la jueza Sylvia Díaz Solla, del Tribunal de Primera Instancia de Bayamón.
La determinación la tomó luego de escuchar el testimonio de Xadiel Cabranes Mojica, al que González Mercado intentó achacarle el asesinato. El juicio está pautado para comenzar el próximo 16 de diciembre.
La familia de Rosimar se encontraba en sala al momento de la decisión. Ninguna persona relacionada a González Mercado, quien ha participado de este proceso de vista preliminar vía Zoom, estuvo presente.
Previamente, Cabranes Mojica testificó que unos vídeos sexuales que supuestamente González Mercado encontró en el celular de su pareja, Jonelys Soto Adorno, provocó una disputa entre estos que pudo haber terminado con el secuestro y asesinato de Rosimar. Durante su testimonio, el joven de 20 años explicó que conocía a González Mercado desde 2012, cuando ambos vivían en la misma urbanización, y que utilizaban drogas juntos. Alegó que el acusado utilizaba marihuana, Xanax y Tramadol.
Cabranes Mojica afirmó que compartía con su novia, a la cual identificó como Samantha, y la pareja compuesta por González Mercado y Soto Adorno, a quien dijo conoció en el 2017, en varias ocasiones durante este año. La parte más relevante que detalló el joven en su testimonio fue que el 16 de septiembre, un día antes del asesinato de Rosimar, González Mercado le escribió un mensaje por Whatsapp en el que le indicó que quería tener una conversación con él. En ese mensaje se destacó la frase “la pu… esta”.
“Ahí yo estaba guiando y recibo la llamada de Jay que había encontrado unos vídeos sexuales a Jonelys”, afirmó en su testimonio. “Recibo una llamada. Lo pongo en ‘speaker’, porque estoy guiando. Jay con voz llorosa me dice que se siente como mierda… Él está como lloroso. Me dice él que se siente mierda por haberle dado su confianza. Empieza a llorar y me dice ‘ya tú verás’ y me engancha la llamada”, añadió el testigo, en medio de varias interrupciones por diferencias entre las fiscales -Lizette Sánchez Vázquez, Gretchen Pérez Catinchi y Jessika Correa- con el abogado del acusado, Manuel Morales Schmidt.
El testimonio, pese a las interrupciones, reveló que el malestar de González Mercado fue porque el acusado supuestamente le dijo “me encontré unos vídeos maman… a esta (no dice nombre). Me siento mierda por haberle dado mi confianza”.
Estas expresiones fueron escuchadas en sala por la madre de Rosimar, Rosa Gómez Ortiz, y su padre, Roberto Rodríguez Negrón. También se encontraba su tía, Marangelí Gómez Ortiz, y un tío que no fue identificado.
En su testimonio, Cabranes Mojica informó que le recomendó
“¿Qué prueba es clara? Que Jay sí llegó en su carro y la secuestraron. Xadiel no estaba allí. El mismo que se pone allí es Jay, el que tiene motivos porque está molesto es Jay… Esa es la prueba”
GRETCHEN PÉREZ CATINCHI FISCAL
a González Mercado que “cogiera las cosas con calma”. Dijo que la contestación que recibió fue una caricatura con el corazón roto.
De inmediato, comentó que le escribió a Soto Adorno para saber si se encontraba bien.
“Ella procede a decirme lo que pasó”, expuso.
Sin embargo, la explicación no fue revelada públicamente, ya que el abogado objetó con éxito el que no se pudiera indicar nada de lo que escribió o le dijo Soto Adorno.
El testigo continuó respondiendo preguntas de la fiscal Correa, en las que reveló que en la tarde y noche del 17 de septiembre, día en que Rosimar fue secuestrada, estuvo con su novia Samantha en casa de su mamá y que fueron a comer sushi. El acusado, sin embargo, estipuló en su declaración jurada que esa noche estuvo con Cabranes Mojica y que fue éste quien asesinó a Rosimar de dos disparos. Pero, durante la vista trascendió que la autopsia reveló que el cuerpo presentaba unas 15 detonaciones. Asimismo, el agente que investigó el caso, Jesús Alicea Ortiz, informó durante el proceso judicial que hay pruebas que ubican al testigo en los lugares que informó durante las horas del crimen. Por ejemplo, existen vídeos del lugar a donde fue a comer con su pareja.
Por otro lado, Cabranes Mojica dijo que fue cuando se encontraba con su pareja en el auto conversando ese 17 de septiembre que supo mediante una publicación en Facebook que Rosimar y Soto Adorno estaban desaparecidas. Explicó que intentó conseguir a Soto Adorno a través de mensajes a su celular, pero que no fue hasta el 18 de septiembre a eso de las 7:00 p.m. que esta le respondió por Messenger. Relató que el 20 de septiembre vio un Facebook Live del momento en que el agente Wilson Cordero entrevistaba a Soto Adorno sobre el caso de Rosimar.
“Escuché varias cosas. Yo sé que ella mintió, porque ella me había hablado (sobre el caso de Rosimar)”, dijo. “Ya habíamos tenido una conversación y me contó de Jay y de Rosimar lo que pasó, de cómo fue que se le perdió el teléfono”, señaló en otra instancia. El joven trató de estipular en varias instancias que siempre pensó que González Mercado estaba implicado en la desaparición de Rosimar y su muerte. Pero, por objeciones del abogado, su testimonio sobre el particular no fue permitido.
Al final de la vista matutina,
Cabranes Mojica reveló que desde el primer día que lo entrevistó la Policía, el 22 de septiembre, le entregó su unidad de celular a la Policía. En este móvil se supone que esté la prueba de las conversaciones que sostuvo con González Mercado y Soto Adorno referente al crimen.
La fiscal Pérez Catinchi informó que su contenido no será utilizado como prueba en esta vista preliminar. Se daría a conocer en el juicio.
A su salida, Morales Schmidt indicó “no ha estado contemplado” estipular alguna defensa de insanidad mental de González Mercado o llegar a un acuerdo con la Fiscalía para declararse culpable ante la prueba que ha desfilado hasta el momento.
Mientras, la fiscal Pérez Catinchi explicó a la prensa que no tienen que tener un testimonio que estipule que González Mercado disparó a Rosimar.
“Si dos personas se ponen en concierto y común acuerdo y secuestran a una persona y culmina en el asesinato de una persona, eso se llama en concierto y común acuerdo”, por lo que es un asesinato en primer grado, detalló a preguntas de Primera Hora.
Luego, explicó que “alegadamente, el testimonio de Jay es que está molesto y que llama a Xadiel, que ya vieron que no es correcto, y que le dice que está molesto y que lo va y lo busca y que en el carro deciden, supuestamente, darle un susto (a Rosimar) y van y la secuestran. ¿Qué prueba es clara? Que Jay sí llegó en su carro y la secuestraron. Xadiel no estaba allí. El mismo que se pone allí es Jay, el que tiene motivos porque está molesto es Jay… Esa es la prueba”.
Rosimar, de 20 años, fue secuestrada cerca de su residencia, en el barrio Sabana Seca de Toa Baja, el 17 de septiembre a las 9:22 p.m. Su cuerpo fue hallado el 27 de septiembre en un paraje de la carretera PR-167 de Dorado.
González Mercado fue acusado el pasado 15 de octubre de cinco cargos por el crimen de Rosimar. Estos son uno por asesinato en primer grado, un cargo por secuestro, dos cargos por violación a la Ley de Armas y un cargo por brindar información falsa a las autoridades.