“GRUPOS DE ODIO” SIGUEN ACTIVOS EN ESTADOS UNIDOS
Según un informe del Southern Poverty Law Center, estas organizaciones representan una amenaza peligrosa para el país
WASHINGTON. Al menos 838 grupos extremistas y “de odio” estuvieron activos en Estados Unidos el año pasado y, aunque el número de organizaciones disminuyó, no ha menguado la amenaza que representan para la seguridad nacional, según un informe presentado ayer por el Southern Poverty Law Center (SPLC).
“Nuestra nación encara la amenaza cada vez más peligrosa del extremismo doméstico”, afirmó Margaret Huang, presidente de SPLC. “Esta constelación de extremistas violentos ha ganado espacio en internet alentada por la retórica racista del presidente Donald Trump”.
El número de grupos disminuyó el año pasado en un 11%, pero el SPLC sigue documentando niveles históricamente altos de extremistas y el informe señaló que en 2015 la cifra de estos grupos saltó de 784 a 892 y ha permanecido muy por encima de los 800 durante toda la presidencia de Trump.
El número de estos grupos específicamente antiinmigrantes se mantuvo estable en 19 en todo el país, con organizaciones así identificadas en Washington, Oregón, California,
Arizona, Texas, Colorado, Florida, Georgia, Carolina del Norte, Virginia, el Distrito de Columbia y Maryland.
La semana pasada el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) usó por primera vez en un año su sistema de alerta a la población indicando que el descontento “alimentado por versiones falsas”, incluida la alegación de fraude en la elección presidencial, podría llevar a ataques terroristas en las próximas semanas.
Aunque no cita una amenaza específica, el DHS advirtió que la información recibida por el Gobierno de EE.UU. apunta a que algunos “extremistas ideológicamente violentos” que se oponen al triunfo electoral del presidente, Joe Biden, en noviembre pasado, podrían continuar movilizándose y organizando actos violentos.
En este sentido, el informe de SPLC afirma que “Trump incitó el 6 de enero a una muchedumbre que incluía grupos de odio y antigubernamentales como Proud Boys, Oath Keepers y Three Percenters a que asaltaran el Congreso de EE.UU. en una insurrección para mantener la supremacía blanca”.
Susan Corke, directora del Proyecto de Inteligencia en el SPLC, indicó que la amenaza “no proviene sólo de grupos antigubernamentales y el riesgo ahora es mayor porque cuentan con medios para propagar sus ideas más allá de sus miembros y de la geografía”.
“Estos grupos han dejado de lado las estructuras organizativas tradicionales y ahora logran una radicalización descentralizada y más difusa”, añadió Corke.
La lista de lo que SPLC clasifica como grupos “extremistas y de odio” no se refiere, exclusivamente, a organizaciones armadas o que promueven actos terroristas, sino también a grupos que promueven el racismo o demonizan a segmentos de la población por su religión, su origen nacional o étnico. Entre esos grupos los hay que denuncian a los inmigrantes o a las personas por su orientación sexual o identidad de género, grupos anti musulmanes y separatistas afroamericanos, de “identidad cristiana” y otros que niegan que hayan ocurrido las matanzas nazis de judíos y otros grupos durante la Segunda Mundial.
También SPLC identifica en su informe grupos neonazis, otros que reivindican el Sur esclavista en la Guerra Civil (1861-1865), el Ku Klux Klan, grupos de “supremacía blanca” y de “supremacía masculina”, o que proclaman la superioridad de sus ancestros vikingos o germánicos.
“Nuestra nación encara la amenaza cada vez más peligrosa del extremismo doméstico”
MARGARET HUANG / PRESIDENTE DE SPLC