37,000 ALUMNOS AL BORDE DEL FRACASO ACADÉMICO
Departamento de Educación busca medidas “remediativas” para impactar a esa población de estudiantes y lograr que pasen de grado en un periodo de tres semanas
Más allá de fomentar que algunas escuelas públicas comiencen a ofrecer clases de manera presencial, el enfoque dentro del Departamento de Educación es tratar de impactar durante las próximas tres semanas a los más de 37,000 estudiantes que están al borde del fracaso académico, incluyendo a unos 1,000 alumnos que están supuestos a graduarse de cuarto año.
Así lo expresó a Primera Hora el secretario interino de la agencia, Eliezer Ramos Parés, al afirmar que a inicio de esta semana habrá unas reuniones con directores regionales y de distrito escolar con el propósito de afinar unas estrategias específicas dirigidas a identificar y atender “de inmediato” a los alumnos que están en riesgo de fracaso, así como los que confrontan algún rezago académico.
“Independientemente de que las escuelas abran o no, hay instrucciones para que los maestros estén accesibles y que propicien reuniones con los padres y madres de aquellos estudiantes que estén frente a un posible fracaso o rezago”, expresó Ramos Parés.
Enfatizó que al proceso se unirán trabajadores sociales, consejeros, enfermeras y sicólogos escolares, quienes en equipo deben procurar fomentar “medidas remediativas” para los estudiantes en riesgo.
“Nosotros no estamos dando directriz de pasarlos por pasarlos. Simplemente, les estamos diciendo a los maestros, padres y madres que se comuniquen por si hay algo que se pueda salvar... creo que en tres semanas se puede hacer mucho. Y repito no es pasar estudiantes porque tenemos que asegurarnos que dominan las destrezas competitivas del grado subsiguiente”, expresó el secretario interino.
Defendió el plan explicando que “típicamente” los maestros trabajan a final del año académico con medidas remediativas. “Puede ser entrega de trabajos, revisión de la ejecutoria del estudiante... pero hay que entrar en esa discusión”, sostuvo.
Mostró particular preocupación por los alumnos que están en veremos de graduarse de duodécimo grado. “Actualmente, hay 19,977 estudiantes que deberían finalizar su cuarto año este año. Pero hay 1,000 candidatos a fracaso si no atendemos esa situación ahora”, subrayó.
En total, el Departamento de Educación tiene 857 planteles con una matrícula estudiantil de 272,102 alumnos. De estos, unos 90,000 pertenecen al programa de Educación Especial.
Aludió a que la agencia realizará un estudio a fin de identificar cuántos alumnos confrontaron problemas de conectividad, así como los que requerirán a partir de agosto ayuda individualizada para cubrir algún rezago académico.
A estos fines, mencionó que durante el verano se realizarán unos campamentos en el que se le dará peso a destrezas académicas.
Poco interés de padres en clases presenciales
De otra parte, el secretario interino no pudo precisar la cantidad de estudiantes que pudieran estar retornando esta semana al salón para clases presenciales, pero tomando en consideración la participación que hubo en marzo auguró que son pocos.
“Reconozco que es un número bajo y la gran mayoría de los padres, su posición era no enviar a la escuela a los hijos en aquel momento en particular por miedo a los contagios... el llamado hoy es que esa determinación tome en cuenta el riesgo que tienen sus hijos de fracasar académicamente y el aspecto socioemocional que tienen los alumnos”, expresó.
“El Estado les falló...”
Para los portavoces de la Asociación y Federación de Maestros de Puerto Rico, atajar a último momento el problema de rezago y fracaso académico de miles de estudiantes de escuelas públicas “es como poner un parcho” sobre una gran grieta.
“Estamos hablando de estudiantes que no tuvieron co
nectividad y se les garantizó un ‘voucher’ para contratos de internet en octubre. Además, no fue hasta diciembre que se terminaron de entregar las computadoras. Aquí las inequidades y la falta de acceso a la comunicación ocurrió de diversas formas y en gran medida fue responsabilidad del gobierno. El Estado les falló a esos estudiantes que son candidatos a fracaso y ahora quiere remediar y poner parchos a la situación con clases remediales en verano. Eso no es así. Esto hay que atenderlo de raíz”, sostuvo la presidenta de la Federación de Maestros, Mercedes Martínez.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Maestros, Víctor Bonilla, expresó que le preocupa que se obligue a los maestros a “pasar de grado” a estudiantes que están fracasados académicamente y que durante todo el año no mostraron responsabilidad con sus estudios.
“Créeme que aquí los maestros, directores, trabajadores sociales, entre otros, han hecho lo indecible para identificar a los estudiantes con rezagos. Y en muchísimos casos se ha atendido la situación. También conocemos a los estudiantes y padres que han tenido problemas de conectividad. Entendemos que a esos sí se puede evaluar. Pero nuestra posición es que no podemos otorgarle una nota a los estudiantes que no han hecho un mínimo esfuerzo, aun cuando se ha tratado de llegar a sus padres... eso es faltarle el respeto al personal y maestro que dio la milla extra para que el estudiante estuviera conectado y pudiera obtener el pan nuestro de la enseñanza, así como para todos aquellos padres y madres que cumplieron con su responsabilidad”, manifestó Bonilla.
Nosotros no estamos dando directriz de pasarlos por pasarlos. Simplemente, les estamos diciendo a los maestros, padres y madres que se comuniquen por si hay algo que se pueda salvar... ”
ELIEZER RAMOS PARÉS
SECRETARIO INTERINO DE EDUCACIÓN