Ojo a ataques espaciales
BRUSELAS. La OTAN modificó ayer sus reglas para incluir los ataques espaciales en su doctrina de defensa colectiva.
El Artículo 5 del tratado fundacional de la Organización del Tratado del Atlántico Norte establece que un ataque contra uno de sus miembros es un ataque contra todos. Hasta ahora, ello abarcaba principalmente a agresiones tradicionales como las provenientes de aire, tierra o mar o, más recientemente, del ciberespacio.
Pero en un comunicado vinculado a la cumbre de esta semana, la alianza aclaró que consideraba “ataques desde, hacia o dentro del espacio” como amenaza potencial a cualquiera de sus 30 miembros. Dichos ataques amenazan “la prosperidad, seguridad y estabilidad nacional y euroatlántica, y pueden ser tan dañinos a una sociedad moderna como un ataque convencional”.
Tales ataques pueden llevar a la invocación del Artículo 5. La decisión sobre cuándo un ataque de ese tipo es causante de la activación del Artículo 5 será tomada según las circunstancias del caso por el Consejo del Atlántico Norte”, añadió.
Unos 2,000 satélites orbitan la Tierra y más de la mitad de ellos son de países miembros de la OTAN, permitiendo todo tipo de servicios, desde teléfonos celulares a cajeros automáticos y pronósticos del clima. Los militares dependen de ellos para navegar, comunicarse, compartir inteligencia o detectar lanzamientos de misiles.
En diciembre de 2019, la OTAN declaró el espacio su “quinto teatro de operaciones” después de tierra, mar, aire y ciberespacio. Miembros han expresado inquietud por las actividades espaciales de China y Rusia.
La cláusula de defensa mutua de la OTAN ha sido activada solo una vez: tras los ataques del 11 de septiembre del 2001.