TRABAJAN CON LA DIVERSIDAD FUNCIONAL
Education for Inclusion Academy llega al Municipio de Villalba con la primera escuela especializada, en pueblos limítrofes, en educación especial
VILLALBA. Una educación individualizada y con miras hacia la independencia. Este es el norte de la recién inaugurada escuela privada Education for Inclusion Academy, en Villalba, que busca mitigar el rezago y robustecer el aprendizaje de estudiantes con condiciones especiales.
La escuela, que revivió la S.U. José González Ginorio en el barrio Romero, provee, además, un ambiente sereno y pacífico, pues el lago Toa Vaca sirve de telón de fondo, cuyo sonido y encanto también aportan al bienestar de la población estudiantil.
“Este ambiente es propicio para ellos”, manifestó la subdirectora del programa de instrucción en el hogar, o “homebound”, Sonia Torres Alvarado.
“Muchos de nuestros nenes necesitan calmarse y, quizás, en una escuela pública, con tanto estímulo constante, evocan ciertas conductas (negativas). Aquí ellos se sienten bien acogidos, tranquilos, relajados (con) el sonido del agua (y) los pajaritos. La ambientación que nosotros tenemos ahora mismo con la vista, a ellos le crea ese confort, esa seguridad, en donde ellos se sienten relajados”, agregó.
La escuela es la primera de su clase en el área. Los siete maestros “homebound” y cuatro educadores presenciales sirven a 32 estudiantes con distintas necesidades especiales provenientes de municipios limítrofes, como Coamo, Santa Isabel, Guayanilla, Peñuelas y Yauco. Dos alumnos llegan hasta la escuela para recibir clases presenciales, mientras que los restantes lo hacen desde el hogar.
“Por lo general, ese tipo de escuela se queda en el área metropolitana. A veces, los papás están buscando alternativa de ubicación favorable para sus hijos y tiene que ir lejos y, si no, se quedan sin el acceso”, resaltó el director académico Rafael Román Meléndez, quien fundó la primera escuela de este tipo en el 2021 en Juncos, la cual hoy día tiene cerca de 40 estudiantes y 20 maestros.
La población escolar de Education for Inclusion Academy incluye a alumnos con diferentes condiciones: algunos están encamados, otros sufren de convulsiones constantes o tienen autismo. Previo a ser aceptado en la escuela, el estudiante es evaluado y luego se determina qué servicio le beneficia, si presencial o desde el hogar.
A través de un currículo único de enseñanza lúdica -o de aprendizaje mediante juegos, el cual es diseñado por los maestros de la escuela- se busca que las clases no se limiten a una libreta y un lápiz. Se persigue que las enseñanzas sean variadas, incorporando distintos elementos, como el uso de la tecnología y la aplicación práctica a través de proyectos y juegos.
“La idea es que el niño vaya en inclusión y, en algún momento, pase a una escuela regular menos restrictiva”, señaló el también ex secretario del Departamento de Educación (2013 al 2016).
“Es un currículo integrado, colaborativo. Vamos a buscar la manera en cómo te presento esa destreza a trabajar, de diferentes formas”, explicó, por su parte, Torres, quien fue maestra de educación especial durante una década en una escuela pública.
“Nosotros, como Education for Inclusion Academy, podemos brindarle la enseñanza individualizada a ese niño, porque tenemos reducción de grupo (y es) más dirigido a la necesidad que el estudiante presenta en esos momentos”, continuó.
Pese a que la escuela aún no ha cumplido un año en función en el municipio sureño, ya está cosechando frutos, máxime porque ha retenido el 100% de su matrícula y de sus maestros.
“Estos niños no necesitan el constante cambio de maestros. Necesitan una estructura que sea permanente, que no haya tanto cambio”, afirmó Román.
Torres aseguró, por otro lado, que el desempeño de los alumnos fue evidente mediante las pruebas diagnósticas, ya que en la segunda ocasión que se les administró, mostraron más independencia y espontaneidad en responder las preguntas.
Asimismo, los padres han asegurado que sus hijos han recibido la mayor cantidad de servicios en toda su carrera estudiantil.
“El hecho de que el estudiante tenga una necesidad no significa que yo le puedo eximir de la educación. Vamos a provocar en ese nene que muestre interés, quizás que abra sus ojos, quizás que emita un sonido… y, cuando llegan fuera de la escuela, ellos van a ser más independientes, porque ese es el fin, evocar que ese niño, dentro de la sociedad que estamos viviendo ahora mismo, pueda ser independiente”, detalló Torres.
Otra ventaja que tiene la escuela, recalcó Torres, es que los maestros de instrucción en el hogar llegan a lugares sumamente remotos de las comunidades sureñas y, también, brindan apoyo a los padres, quienes suelen estar abrumados por los retos de criar a un hijo con diversidad funcional.
“Cuando vi las necesidades de Guayama, Peñuelas, esos lugares. Yo decía ‘¿aquí vive gente?’ Sí, vive gente y… claro que vamos llevar los servicios. Vamos a llegar hasta allá”, prometió Torres.
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Nos falta mucho, estamos apenas comenzando, y nuestro objetivo a corto plazo es fortalecer los servicios en Villalba como lo hicimos en
Juncos y prepararnos para el (semestre) en agosto”
RAFAEL ROMÁN MELÉNDEZ / DIRECTOR ACADÉMICO Y EX SECRETARIO
DE EDUCACIÓN
“
Tenemos salones reducidos a cinco estudiantes con dos maestros... Al estar dirigido, tienen mayor exposición a que el estudiante pueda dominar la destreza”
SONIA TORRES ALVARADO
/ SUBDIRECTORA DEL PROGRAMA DE INSTRUCCIÓN
EN EL HOGAR