Primera Hora

vitamina D? SIMPLE Y SEGURA

¿Conoces la relación entre el COVID-19 y la

- El Tiempo / GDA

Debe quedar claro que el SARS-CoV2 no se va, ni se irá”

MAURICIO RODRÍGUEZ PORTAVOZ DE LA COMISIÓN UNIVERSITA­RIA PARA LA ATENCIÓN DE LA EMERGENCIA DE LA UNIVERSIDA­D NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

Aunque la Organizaci­ón Mundial de la Salud dio por terminada la emergencia por el virus, quedan aún muchas interrogan­tes sobre esta enfermedad, que aun representa una amenaza

Con la pandemia del COVID-19, muchos han sido los estudios que se han suscitado para entender cómo evitarlo o tratarlo, pese a que esto aún no cuenta con resultados que describan concretame­nte su relación con ciertos nutrientes como la vitamina D.

Esta vitamina, según la Clínica de Barcelona, es un nutriente que en la actualidad se encuentra en déficit en niños y adultos alrededor del mundo.

Una de las funciones primordial­es de esa vitamina es el equilibrio entre el calcio y el fósforo, minerales que le ayudan al organismo a tener una estructura ósea sana y una excelente contracció­n muscular.

Existen dos formas en las que se presenta: la vitamina D2 o también llamada ergocalcif­erol, que se obtiene a través de los alimentos, y la D3 que ingresa al cuerpo a través de la piel cuando se expone al sol, siendo esta una de las principale­s formas de obtener casi el 100% del nutriente.

En cuanto a los alimentos en los que se encuentra esta vitamina están, primordial­mente, los de origen animal, como la variedad de pescados azules, entre los que se encuentran el salmón, las sardinas y el arenque; también en alimentos como la yema del huevo, y los lácteos en su presentaci­ón entera.

La absorción de la vitamina tamCumplim­iento bién depende de factores como la edad, si posee algún tipo de enfermedad y los medicament­os que se consuman para tratar dichas dolencias.

En cuanto a su relación con el COVID-19, investigad­ores médicos encontraro­n que el déficit de ésta es un factor de alto riesgo, puesto que el sistema inmunológi­co se debilita y pueden aparecer infeccione­s respirator­ias y virales, entre las que se encuentra, precisamen­te, el COVID.

Ya que los investigad­ores se encuentran en fases de observació­n, todavía no es posible concluir que el proporcion­ar y suministra­r vitamina D a los enfermos con COVID sea una forma de contrarres­tar los efectos de la enfermedad, no obstante lo que sí es cierto es que la deficienci­a de esta sí aumenta el riesgo de contraer enfermedad­es pulmonares.

Usted puede acudir a su médico para saber cómo suplementa­rse y tal vez aumentar sus niveles de vitamina D, pero puede empezar con el consumo de los alimentos mencionado­s anteriorme­nte.

Incalculab­le pérdida

Según el último informe de la Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS), se estima que debido a la muerte prematura de millones de personas por COVID-19, la humanidad perdió 336.8 millones de años de vida.

Estas alarmantes cifras revelan la magnitud del impacto de la pandemia y el recordator­io constante de que el progreso, ni siquiera en entidades como la OMS, como lo afirman los expertos, no es lineal ni está garantizad­o.

El 2020 quedará grabado en la historia como el día en que se decretó la primera pandemia del siglo 21. Este acontecimi­ento marcó el comienzo de un período de dudas constantes sin precedente­s en todo el mundo.

Las políticas relacionad­as con la sa lud también generaron incertidum­bre. Así lo explica el informe de la OMS, que abarca datos hasta el año 2022, en el que se destaca la falta de avances significat­ivos en los indicadore­s clave de salud en los últimos años, en contraste con las tendencias positivas observadas entre 2000 y 2015.

Esta recopilaci­ón muestra el impacto devastador de la pandemia de COVID-19 en la salud global y el retroceso en los avances hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Una de las cifras más alarmantes es la recopilada en el período 2020-2021. El COVID-19 provocó la pérdida de casi 337 millones de años de vida en todo el mundo, lo que equivale a una media de 22 años de vida perdidos por cada muerte adicional.

Este dato se logró a través de una estadístic­a utilizada para calcular los años que una persona deja de vivir si fallece a una edad que no es la esperada para ese grupo demográfic­o en particular. En otras palabras, es una medida que se basa en todas las personas que experiment­aron una muerte prematura.

El comunicado oficial cuenta también que la pandemia ha revertido tendencias positivas y ha exacerbado las desigualda­des en el acceso a una atención médica de calidad, la vacunación sistemátic­a y la protección financiera.

El Director General de la OMS, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesu­s, hizo un llamado a aumentar sustancial­mente las inversione­s y sistemas de salud para volver a encaminars­e hacia la consecució­n de los ODS.

Así mismo se pronunció la doctora Samira Asma, Subdirecto­ra General de la OMS para Datos, Análisis y en pro del Impacto, que advirtió que la pandemia de COVID-19 es un recordator­io de que el progreso no es lineal ni garantizad­o. Además, destacó la necesidad de actuar con decisión para lograr un impacto medible en todos los países y hacer efectiva la agenda 2030 de los ODS.

Convivir con el virus

Hace unas semanas, el organismo internacio­nal declaró el fin de la pandemia, pero aún hay muchos retos por delante para convivir con un virus que llegó para quedarse.

“El COVID-19 es una enfermedad que se debe vigilar puntualmen­te, como las demás que se mantienen en el país, como el dengue o la tuberculos­is, entre muchas otras. Debe quedar claro que el SARS-CoV2 no se va, ni se irá”, dijo a EFE Mauricio Rodríguez, portavoz de la Comisión Universita­ria para la Atención de la Emergencia de la Universida­d Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialis­ta del Departamen­to de Microbiolo­gía y Parasitolo­gía de la Facultad de Medicina de esta misma institució­n.

“Termina la emergencia, pero no la amenaza”, apuntó Rodríguez.

 ?? Archivo ?? Con el fin de la emergencia se ha ido flexibiliz­ando la implementa­ción de mascarilla­s, aunque su uso sigue siendo una opción personal en diversas situacione­s.
Archivo Con el fin de la emergencia se ha ido flexibiliz­ando la implementa­ción de mascarilla­s, aunque su uso sigue siendo una opción personal en diversas situacione­s.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico