20 Minutos Barcelona

Ubasart defiende su gestión mientras arrecian las peticiones de dimisión

- M. L.

La consellera de Justicia, Gemma Ubasart, declaró ayer ante la Diputación Permanente del Parlament de Catalunya que el preso que la semana pasada asesinó a una cocinera en la cárcel Mas d’Enric (Tarragona) y luego se suicidó tenía una evolución «favorable», por lo que el riesgo de que ocurriese algo trágico era «bajo». «Hasta 14 veces se revisó su ficha, la última en julio del año pasado», dijo ante la atenta mirada de los grupos parlamenta­rios.

Tras las críticas hacia la gestión en los centros penitencia­rios catalanes, defendió que «el riesgo cero no existe» y que «con la informació­n recopilada hasta el día de hoy y la evidencia empírica de los miles de casos similares que han pasado por el sistema era difícilmen­te previsible el desenlace fatal del 13 de marzo».

Durante su declaració­n en la Cámara catalana, la consellera detalló que la víctima y el agresor habían trabajado durante cuatro años juntos en dos periodos distintos y que «no consta ninguna queja formal ni informal de la cocinera respecto del interno». Además, informó de que el agresor no sufría patologías mentales. También ha explicado que el interno pudo trabajar en la cocina, con cuchillos, así como en otros servicios auxiliares, por su buena

Consulte toda la informació­n y la última hora de la informació­n de la Comunitat y de Barcelona en 20minutos.es conducta y desarrollo, ya que solo hay registros de un incidente con otro preso en octubre de 2023. A pesar de ello, aseguró que desde su departamen­to se van a implementa­r medidas para que no vuelva a pasar algo similar.

Se niega a dejar el cargo Sin embargo, estas explicacio­nes no fueron suficiente­s para detener las peticiones de dimisión que no solo llegan desde los trabajador­es de los centros penitencia­rios, sino también de la política. Junts, Vox, Ciudadanos y PP también han pedido su dimisión por la muerte de la cocinera y por su gestión posterior. Por su parte, los socialista­s han solicitado que se asuman responsabi­lidades, a pesar de que no han señalado directamen­te a la consellera. La

CUP y los comuns declararon que las protestas de los trabajador­es son «legítimas» y advirtiero­n al Govern de que debe vigilar que las movilizaci­ones no impliquen la vulneració­n de los derechos fundamenta­les de la población penitencia­ria.

Ante estas reclamacio­nes, la consellera reiteró que no piensa dimitir ni hacer destitucio­nes

Los sindicatos de funcionari­os de prisiones tildaron de «decepciona­nte» e «indignante» la comparecen­cia de la consellera y anunciaron que mantendrán las protestas los próximos días, aunque sin concretar ninguna. Defienden que Ubasart no les ha dejado «ninguna otra salida» y que los profesiona­les están hartos. Antes de la comparecen­cia de la consellera, unos 80 funcionari­os de prisiones, entre ellos el sobrino de la víctima, Pablo Martínez, se concentrar­on ante el Parlament. A la llegada de la consellera Ubasart al edificio, los trabajador­es la abuchearon.

Por otro lado, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) informó ayer de que un total de 34 vistas y cinco declaracio­nes judiciales han quedado suspendida­s como consecuenc­ia de las protestas, así como 17 actos judiciales. ●

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ACN La consellera fue abucheada a su llegada al Parlament.

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